Me han plantado un árbol

¿ESTE ÁRBOL NOS DEJARÁ VER EL BOSQUE?

Pues nada, que abro esta mañana mi ‘outlook’ por eso de echar una mirada a lo que me llega de fuera, y me encuentro, entre mucha ‘basura’, con un mensaje de la muy ilustre Telefónica que me dice lo siguiente: “Gracias por plantarte y ayudarnos”. Trato de averiguar qué puede haber tras este críptico texto. No sé si me hablan de una jugada de mus, de póquer o de cualquier juego de cartas donde uno se ‘plante’ o se refiere a que me he plantado y ya no me van a pasar ninguna factura.

Intrigado, abro el correo y veo una especie de tronco de árbol y ,clavado en él, un gran cartelón que reza así: “Tu nombre ya está escrito”. Más perplejidad aún. Ya no sé si es que mi nombre está escrito en el libro record de los Guinnes, si es que me han registrado en esas listas que los vendedores se van pasando de mano en mano, si me han inscrito en el libro de morosos o a quién coño le interesa registrar mi nombre. Sigo intrigado, así que me fijo en lo que pone más abajo: “Pincha aquí y compruébalo”. Esto me parece tan misterioso como el Código da Vinci que no me he leído. Pincho. Me aparece un paisaje con un cielo azul y un prado muy verde , una serie de árboles que van avanzando hacia mí portando en sus troncos sendos nombres... Sergio, Andrés, Rafa y una flechita que indica que ya viene el mío... Y allí aparece ‘mi’ árbol, con mi nombre.

Reconocerán que la gente del marketing sabe montárselo. En una pantalla aparece la explicación del enigma: “ Gracias a todos los que como tú, Reciben la Factura sin Papel, (sic) nuestro proyecto de reforestación de los bosques de ribera sigue creciendo”. Sólo me queda que me digan en qué ribera está ‘mi’ árbol para ir hacerle una visita, conocerle y, si lo necesita, abonarle un poco, regarle, y charlar un rato con él mientras me tomo un bocadillo. Quitaré el cartelito con mi nombre y le bautizaré con algún nombre que le siente mejor. No sé qué nombres convienen mejor a un árbol, pero podía llamarle ‘Buenasombra”, “Fresquito”, “Espigao”... Bueno, parece que me he ‘liaó’, y es como si estuviera poniendo nombres a unos toros en lugar de a un árbol. Ya pensaré alguno.