Tiempo de dunas

CRÓNICA VERANIEGA
by DOUCE

Esta mañana he visto a mi papá con cara algo seria e intuí que algo debía habérsele revuelto en el interior. Así que fui directa al grano y le pregunté:

-¿Qué te pasa? El me contestó enseguida , como si estuviera esperando mi pregunta.

- Pues mira Douce, como el día se ha levantado con cara mustia y chispeando, he empezado a pensar , antes de tiempo, que este verano tan tranquilo y feliz que hemos pasado, se nos acaba.

- Ya tío, eso ya lo sé. No querrás tener vacaciones todo el año . Esto no es "Marina d'Or, vacaciones todo el año” (por cierto que cada vez me cae más gordo ese anuncio y los bustos parlantes que lo promocionan) . Tendrás que hacer como que curras. De todas maneras, te queda aún más de una semana y lo que tienes que hacer ... ¿me permites un latinajo? 'Carpe diem!', que no sé muy bien lo que quiere decir , pero por lo que deduzco, trata de decir algo así como "Disfruta de cada día, y si es posible de cada minuto , de cada segundo". Haz como hago yo, que no miro hacia atrás, ni pienso en el futuro. Vivo completamente al día, sin preocuparme, porque sé que en cada momento tendré lo que necesito.

- Tienes toda la razón del mundo, no tengo motivos especiales para quejarme, además de los habituales. Y tampoco el trabajo es algo que me agobie. Ha sido una sensación pasajera. Y hoy , como no hace día de playa, te voy a llevar a un sitio nuevo que te va a gustar.

Así que me subí al coche, nerviosa, pensando cómo sería ese sitio nuevo. Llegamos al bosque de Liencres, pero en lugar de internarnos por entre los árboles como otras veces, bajamos casi hasta la playa. Luego nos dirigimos hacia la izquierda y yo empecé a ver mucha arena, venga arena. Mis patas se hundían en aquella alfombra tan fina y dejaba unas huellas como si por allí hubiera andado un oso. Yo me perdía entre los juncos y los cardos marinos, pero no me acercaba para que no me pincharan. Mi papá me llamó y me explicó - él siempre en plan profe, aunque de esto debe saber lo justo y eso porque se ha informado -que este paisaje lo llaman dunas. El nombre me gusta porque es corto, como Douce, y además porque es nuevo para mí. Yo no hacía más que explorarlo en todas las direcciones entre aquellos matojos.

Mi papá me llamó de nuevo y siguió con su rollo, que estas montañas de arena se formaban porque el viento empujaba la arena de la playa hacia el interior junto a las que arrastraba el río Pas que desemboca en esta zona. Las pocas especies vegetales que allí crecen fijaron el terreno y una plantación de pinos marítimos plantados en los años cincuenta han contribuido a la estabilización de las dunas y han dado lugar a un nuevo paisaje. Yo ya no escuchaba si por allí viven mamíferos como yo: erizos, musarañas , sapos, lagartos y otros bichos . En lo que sí me fijé fue en unos pájaros que picoteaban por los bordes cercanos y cuando yo avanzaba se subían a los matorrales.

Después pasamos el terreno acotado y desembocamos en la playa. Apenas había gente, casi únicamente los socorristas algo aburridos por no tener trabajo en una playa que por ser mar abierto y de fuertes olas, es bastante peligrosa. También vimos a un grupo de surfistas, porque es una playa ideal para los que les gusta eso de deslizarse montados en las olas, y escasos bañistas que se entretenían en hacer volar unas cometas enormes.

Yo me he pasado una estupenda mañana correteando a mis anchas y creo que a mi papá se le ha olvidado eso tan cursi de la “rentrée”, o vuelta al cole. Yo también voy a echar de menos el verano, porque podré pasear menos y veré menos la playa. Pero yo me adapto mejor a las circunstancias temporales y no me como el tarro de cómo podrían ser las cosas, si no fueran lo que son. Tengo mi particular sistema filosófico. Vive lo que vives.

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