La ‘otra’ Selección nacional

Como comprenderán el Náufrago no tiene ni idea de las coordenadas que rigen la
cosa política. Por eso, a menudo se equivoca. Supongo que le ocurre lo mismo a la inmensa mayoría de españoles y españolas, vascos y vascas. Dudo incluso que entiendan mucho más los que imparten doctrina, opinan, conceden credenciales o anatematizan.

Con la libertad que da, pues, el derecho a equivocarnos, ha mirado la foto de la
‘Selección española’ que competirá durante cuatro años en el campeonato nacional e internacional de la Champions League política. Como ocurre con el mal llamado ‘sabio de Hortaleza’, el ‘sabio de la Moncloa’ ha confeccionado su selección según sus gustos, sus filias, sus fobias, su concepción del juego político. Los entrenadores, tienen sus preferencias, sus propias obsesiones y convocan o descartan a los jugadores que les petan. Están los ‘villa’, los ‘torres’, los ‘xavi’… y los ‘raúles’. Luego están los millones de seleccionadores que cada españolito o españolita, vasco o vasca, guarda en el armario de sus preferencias o sus antipatías personales y que seguramente no coinciden con los ‘aragonés’ o los ‘rodríguez’. Eso es lo que llaman disconformidad democrática y derecho al pataleo.

El Náufrago, al abrir esta mañana el periódico ha visto la ‘alineación’ que ha confeccionado el entrenador y jefe del cotarro Rodríguez Zapatero. Maña, y talante sí parece haber demostrado para engañar a los unos y los otros que todavía siguen haciéndose cruces desde todos los lados de la península, preguntándose cómo se la han colado, por no emplear otro participio más explícito.

Y ahí están. Mira con admiración y algo de perplejidad algunas caras que sigue viendo en la ‘alineación’. Natural en alguien que no entiende nada del juego político. Cabe en su mollera, por ejemplo, que los dos que figuran arriba del todo, junto al seleccionador, pueden ocupar esos puestos. Sin embargo hay tres caras en la segunda fila que sigue sin entender por qué siguen ahí, tras algunos ‘desatinos’, algunos talantes ‘bermejeros’ o muchos ‘descarrilamientos’ de alta velocidad. Pero misterios debe tener doña Política que se escapan al común de los mortales.

Hay muchísimas observaciones más que el Náufrago pudiera hacer al ver la alineación. Quizá esperaba que la remodelación fuera a indicar que empezaba otra etapa, pero ya ve que el entrenador ha preferido conservar la estructura del equipo. Hay jugadores ‘admirables’ que aún están dispuestos a seguir dando patadas al balón después de tantos partidos jugados, a pesar de que sus caras, sus declaraciones y sus modos indiquen un significativo cansancio. Pero ahí están jóvenes caras nuevas que además de su juventud ponen la nota femenina que tan del gusto es del entrenador y tan de moda está en la onda de los aires que soplan.

El Náufrago los va a mirar por una vez, luego se retirará a su isla. Se encuentra ‘muy mayor’ para seguir a la ‘Selección’, sus partidos, sus victorias y sus derrotas. No siente pasión alguna de aficionado y mira las cosas con democrática resignación, sin pizca de entusiasmo. Que ganen, si pueden y saben