Crónica de una muerte anunciada

"LA MADRE DECAPITADA ADVIRTIÓ EN 2005 DE QUE SU HIJO DEMENTE ACABARÍA MATÁNDOLA" ( De la prensa)

El Náufrago no sabría describir bien lo que sintió cuando vio ayer este video, al oír cada frase, ver cada gesto o tratar de leer los sentimientos contradictorios que agitaban el corazón de esta madre a la que le costaba ordenarlos. Cada frase era una sacudida. No sabía a qué atender, si a su impotencia, a su lucha interior entre el amor de madre y el temor a un posible asesino que en cualquier momento podría terminar con su vida, la de su hija o la mujer de aquella 'criatura' como ella la llamaba. E insistía: "No es malo, lo que él toma (la droga) le hace malo y a nosotros nos está destrozando la vida".

Hablaba confusamente de todo: de la inoperancia de la Justicia, de la falta de asistencia para este tipo de personas, de sus miedos. De su miedo a que ocurriera lo que sucedió el lunes en un pueblo murciano. Y esta frase que se le quedó clavada porque sintió la sinrazón, lo incomprensible de esa profética realidad:"Cualquier día de estos me mata, y una vez que uno está muerto ¿Qué pasa? Lo cogen, lo detienen, lo meten en la cárcel y yo muerta, él en la cárcel, y no hay más solución..."

Las lágrimas corren solas por un rostro que es todo bondad y el ejemplo más claro de la impotencia, que suplica, sin fe, que por favor"Alguien haga Algo". Entonces es cuando uno siente ganas de gritar muy alto: ¿" Dónde cojones está esa Igualdad"? ¿Quién coño puede decir, solemnemente sin que se le caiga la cara de vergüenza "Cualquier cobarde que levante la mano a su mujer tiene que tener claro que va a tener en frente a 44 millones de españoles plantándole cara y no a un ser desprotegido?". Palabras, palabras, hueras , mentirosas palabras. ¿Se tomarán 'decisiones', no palabras, para que no sea realidad el que un hijo, muchos hijos sin un centro que les atienda, puedan un día terminar con la vida de los que día a día tienen que convivir con el miedo, porque todo el mundo escurre el bulto y mira hacia otro lado?

Palabras, palabras, mentirosas palabras.

Comentarios

Desgarradores son los hechos que el día a día se encarga de mostrarnos. La penitenciería nada soluciona. Las víctimas mueren en manos de sus victimarios, y la justicia nada puede hacer, excepto liquidarlos de un solo tajo.
Anónimo ha dicho que…
Querido Julio César,

En mi opinión, creo que quizá no sea cuestión 'esencialmente' penitenciaria. A los encargados de ese 'remedio', les puede resultar más o menos al alcance de sus disposiciones, que no ejercen, porque les resulta 'complicado'.

El problema es que no hay 'profesionales' que estén dispuestos a tratar a ese tipo de personas que son fruto de nuestra sociedad de deseos de felicidad a bajo precio y rápido.

Esos 'profesionales' quieren ganar dinero con su oficio. Tratar a estas personalidades que la sociedad de la facilidad crea, no son nada rentables.Prefieren hacer que no oyen a madres que no tienen medios para 'pagarles' sus 'servicios'.

Buscar una atenuación, calmar y reconducir esos impulsos, requiere tiempo, dedicación, centros... y eso no se encuentra en nuestra sociedad de "SOY y COBRO".

Somos miembros y 'colaboradores' de una sociedad en la que lo que importa, es tener dinero. Primero para la hipoteca, luego para el chalet, más tarde para el barco de recreo y después: escribir densos tratados sobre " Cómo subvenir al problema de las personalidades psicopáticas".

Pero a Marta, eso ya le tiene sin cuidado. Su hijo ha logrado lo que los 'especialistas' no quisieron darle: el DESCANSO para siempre.

Entradas populares