Cuando los estudiantes de la UIMP protestan

El ‘Diario Montañés’, del que ya he hablado algunas veces por distintos motivos, se nutre durante el verano en buena medida de las noticias que ‘genera’ la Universidad Internacional Menéndez y Pelayo, alias UIMP. El periódico envía a periodistas, ‘curritos’ y meritorios a cubrir la información y los eméritos profesores, los sufridos alumnos y el lector de a pié tan contentos.

La noticia de hoy me ha sorprendido un poco, porque normalmente todo lo que rodea a esta sacrosanta Institución, se envuelve en el papel de celofán de las loas, los elogios y demás envases laudatorios... Sin embargo, en el periódico de hoy podía leerse este titular:

“Alumnos de Subirats acusan al pensador de ‘discriminación’ y ‘falta de rigor educativo’”
Más de la mitad de los asistentes al curso magistral del profesor y ensayista muestran, en un escrito de protesta, su malestar por el desarrollo de este foro quincenal. (D.M. 8/07/2006)

Y el periodista de turno explica como casi la mitad de los asistentes a este foro, además de haber abandonado en algún caso las clases , ha elevado un escrito de protesta ante las autoridades competentes quejándose de la “despreocupación, ausencia de interés, falta persistente de rigor, improvisación en el desarrollo y otras lindezas...” por parte del profesor director del curso o foro.

Digo que me sorprende gratamente esta ‘rebeldía estudiantil’, porque no suelen ser los ‘modos’ y actitudes en esta Universidad, orlada por una larga lista de nombres de famosos personajes que por ella han desfilado desde que en 1932 , D. Fernando de los Ríos Urruti firmara el Decreto de su fundación. Pensadores , escritores, poetas como Ortega, García Morente, Gregorio Marañon, Miguel Angel Asturias, Aranguren, Alberti, Pepe Hierro, Carmen Martín Gaite, Francisco Ayala; artistas como Saura, Barceló, Chillida, Antonio López; gentes del cine y del teatro , hombres de Estado, políticos, científicos...

Todo esto constituye la cara ‘bonita’ de la UIMP, su reclamo, pero la verdad es que tras toda esa fachada y boato que sirve de reclamo a profesores, estudiantes , veraneantes culturales hay la cara de los intereses más o menos camuflados. Gobiernos, políticos, universitarios han encontrado en esta Institución una manera de hacerse propaganda, de proporcionar dineros y recursos para unas vacaciones ‘pagadas’ con el pretexto de desempolvar viejas ‘lecciones’ apenas actualizadas, sacar de las carpetas conferencias, talleres, foros , tesis para universidades de ‘verano’, de pantalón corto , playeras y cenas de terraza.

Para más de un catedrático madrileño, la UIMP fue durante algunos años, una manera de tener asegurado un verano familiar, y algunos se abonaron durante años a estas vacaciones pagadas en Cursos para Extranjeros o cursos varios. Con el arribo de la democracia los gobiernos turnantes utilizaron sus presupuestos para hacerse propaganda y pagar favores a los intelectuales afines. En torno a todos estos estudios veraniegos suele haber algunos ‘intelectuales’ que más o menos se ofrecen a ‘decorar’ el marco de estos claustros de temporada.

No sólo de papel vive el hombre.