El recogedor de algas. By Douce

He leído el relato de mi papá sobre ese señor vestido de amarillo ( u OMRAP como le llama el 'escritor en el tejado') que recogía algas esta mañana y lo he encontrado de un cursi y un petulante tal, que he decidido dar mi versión mucho más escueta y sencilla .

Para empezar , me parece una cursilería sin nombre eso que dice sobre sobre las "mañanas nubladas, luminosas" ¡No se puede ser más pedante!. Las mañanas nubladas son nubladas y punto. Además que no se meta con ellas, que son los días que yo puedo bajar a la playa.

¿La pregunta al operario (OMRAP) sobre lo que hacía con las algas? Pues en fin, que quieren que les diga, yo me aparté discretamente como que no le acompañaba, porque me parece una sandez. ¿No le veía al buen hombre, sudando la gota gorda, metiéndolas en una bolsa negra? ¿Adónde las iba llevar así? ¿A una piscifactoría? ¿Cómo, en un camión frigorífico? Hace falta ser torpe. A veces este papa mío me hace pasar unos bochornos...

Además, a mí me gusta más la playa sin algas , sin fotosíntesis, y sin mandangas. Mismamente, había un perro, que no es amigo mío porque ladra mucho, que se estaba revolcando en ellas. Tenía a su dueña de los nervios porque se estaban poniendo tibio. Yo para estas cosas soy mucho más mirada, me revuelco donde no haya esa porquería.

- "No siempre, Douce, no siempre , que yo también puedo irme de la lengua..."

Bueno, no le hagan caso , que lo que pretende es despretigiarme por haberle llamado finamente: tonto. Y como siga diciendo sandeces en esta bitácora me hago yo con el timón de esta nave. ¡Agur!

Comentarios

Escritor en el Tejado ha dicho que…
Sé indulgente con tu papá, Douce, que desde que salió la Constitutio Canis estás de un reivindicativo...
Anónimo ha dicho que…
Señor escritor, ya veo que usted se pone de parte de mi papá y no me parece mal, porque a veces necesita de esos apoyos. Yo, como le conozco bien, sé que conviene, de vez en cuando, darle un poco de caña para que se baje un poco del guindo.

Así que seguiré con mi táctica de palo y zanahoria que creo que le viene bien.No está mal que haya quien sepa cantarle las cuarenta y rebajarle la ínfulas en el caso que las tuviere.

Por cierto, me voy a meter también un poco con usted.¿Usted cree que es necesario subirse a un tejado para poder escribir? Por lo que he leído, a usted se le da bien eso de contar las cosas entre la crítica y el gracejo y como yo quiero aliar ambas cosas, osaría preguntarle si es que las cosas se ven mejor subiéndose a un tejado, con lo incómodo que debe ser eso.

Sepa de todas formas que sus observaciones me estimulan, y seguiré dando caña si lo juzgo necesario. Venga, a ver si alivian los calores por esas tierras.

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