He visto a Zeus
Por las mañanas suelo salir a pasear temprano. Mi casa está rodeada de espacios verdes, con distintas variedades de árboles desde un olivo hasta abetos, cipreses, plátanos, olmos y otros ejemplares cuyo nombre no sabría decir.
Durante ese paseo matinal a veces me encuentro con Zeus, sí no se extrañen, es Zeus en persona, es alto , hermoso, un poco arrogante. Al menos es lo que a mí me parece. Su presencia, su andar pausado, me impresionan y procuro esquivarle, siento algo más que respeto, casi miedo diría. Se me encoge un poco el ánimo y procuro mantenerme a distancia.
Como todo los dioses, me mira desde la altura que le concede su autoridad sobre los otros seres y apenas repara en mí, es como si me ignorara aunque yo le increpe. Él sigue su paseo, inmutable, sin ni siquiera hacer caso a mis protestas que le indican que es un poco el lugar de mi paseo. Él tiene todos los espacios del mundo para venir a inquietarme en "mi" paseo. Sé que siento ante su presencia ausente un miedo irracional porque ni siquiera repara en mí, soy yo quien la agiganta.Así de irracionales suelen ser los miedos, muchas veces no los provocan los hechos externos sino que los creamos nosotros mismos y nos torturamos inútilmente.
Esta mañana mi papá ha querido que yo superara ese miedo irracional y me ha dicho :
- "Douce, deja de ladrar y acércate a Zeus. Ven, ya verás que no te hace nada. ¿No ves que Zeus es hermoso? Es un husky muy guapo. Acércate"
Me acerqué un poquito, temerosa, y noté que no me hacía nada.Por no hacer , no me hacía ni caso... Perdí entonces ese miedo que me impulsa a ladrarle cada vez que le veo. Pero en un momento determinado, se decidió a hacerme una caricia. Lo hizo algo bruscamente moviendo la, para mí, enorme mole de su hermoso cuerpo . Me asustó , tuve miedo de nuevo y volví a ladrarle para indicarle que me atemorizaba, que no sabía valorar bien su gesto.
Pero a pesar de esta reacción lógica, creo que ya veo a Zeus más humano y quizá a fuerza de acercarme a él me daré cuenta de que no es más que un perro, como yo.
Durante ese paseo matinal a veces me encuentro con Zeus, sí no se extrañen, es Zeus en persona, es alto , hermoso, un poco arrogante. Al menos es lo que a mí me parece. Su presencia, su andar pausado, me impresionan y procuro esquivarle, siento algo más que respeto, casi miedo diría. Se me encoge un poco el ánimo y procuro mantenerme a distancia.
Como todo los dioses, me mira desde la altura que le concede su autoridad sobre los otros seres y apenas repara en mí, es como si me ignorara aunque yo le increpe. Él sigue su paseo, inmutable, sin ni siquiera hacer caso a mis protestas que le indican que es un poco el lugar de mi paseo. Él tiene todos los espacios del mundo para venir a inquietarme en "mi" paseo. Sé que siento ante su presencia ausente un miedo irracional porque ni siquiera repara en mí, soy yo quien la agiganta.Así de irracionales suelen ser los miedos, muchas veces no los provocan los hechos externos sino que los creamos nosotros mismos y nos torturamos inútilmente.
Esta mañana mi papá ha querido que yo superara ese miedo irracional y me ha dicho :
- "Douce, deja de ladrar y acércate a Zeus. Ven, ya verás que no te hace nada. ¿No ves que Zeus es hermoso? Es un husky muy guapo. Acércate"
Me acerqué un poquito, temerosa, y noté que no me hacía nada.Por no hacer , no me hacía ni caso... Perdí entonces ese miedo que me impulsa a ladrarle cada vez que le veo. Pero en un momento determinado, se decidió a hacerme una caricia. Lo hizo algo bruscamente moviendo la, para mí, enorme mole de su hermoso cuerpo . Me asustó , tuve miedo de nuevo y volví a ladrarle para indicarle que me atemorizaba, que no sabía valorar bien su gesto.
Pero a pesar de esta reacción lógica, creo que ya veo a Zeus más humano y quizá a fuerza de acercarme a él me daré cuenta de que no es más que un perro, como yo.
Comentarios
Trataremos todos, con calma y razones, de irlos superando.
ML