La CIA nos espía

Pues sí parece ser que la CIA nos espía... El ojo del Gran Hernano vigila a los blogueros, nos escruta para ver la información que manejamos y de qué color son nuestros calzoncillos. Lo decía hace unas semanas el Whashington Times, en inglés para que no nos enteráramos, y ahora lo recoge Juan Varela en su Periodistas 21, bien especificado.

Al parecer la Dirección Nacional de Inteligencia, muy listos ellos, han creado el “Open Source Center” (OSC) que traducido quiere decir: Ojo, Sos espiamos Chavales Yo ya he dicho a Douce, mi perra, que cuide mucho sus comentarios y cuando escriba la palabra ‘perros’, especifique bien claro que se refiere a sus amigos y que ella la emplea en el sentido cínico o cánico.

Por mi parte no pondré fotos de mis modelos de nuevos submarinos para reptar bajo tierra que es lo último en espionaje marino y que permiten llegar debajo del Despacho Oval y sorprender a los presidentes de los EEUU ‘soplando’... sus mensajes a Hayden y a John Negroponte el nuevo “Ojo Gran Hermano”. He advertido a los chicos que guarden todos los ‘maddelman’ que tengan por ahí, y que escondan el fuerte indio que le echaron los Reyes un año , no sea que nos bombardeen el ático so pretexto de que ocultamos “armas de destrucción más IVA”.

Les seguiré informando de cómo voy preparando mi estrategia antiespionaje, pero por favor, no se lo chiven al OSC (Open Shit Center)

Comentarios

Enrique Gallud Jardiel ha dicho que…
¡Menos mal que la CIA o alguien nos espía!
Lo triste es la soledad, la incomunicación. Yo no quisiera vivir en un mundo en el que nadie se preocupase de mí, en que sólo fuera una dato en la estadística. Me reconforta mucho saber que hay gente viéndome, aunque sea sin mi permiso, y que a alguien le importo tanto como para saber de qué color son mis canzoncillos. Me hace sentirme parte del género humano. ¡Benditas sean las agencias de inteligencia!
Douce ha dicho que…
Coincido contigo que necesitamos la comunicación, poder expresarnos, que sepan un poco quienes somos y de vez en cuando digan: "aquí estamos". Respecto a este tipo de visitantes, sin que me importe demasiado que se fijen en el horrible color de mis calzoncillos,no serían con los que a mí me apetecería echar una parrafada.

Pero si les interesa saber mis secretos militares ya pueden prepararse, porque va a ser una dura y ardua labor que necesitará gran parte de la plantilla del Open Shit Centre

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