Übersexual, ¡lo último!
¿Y TÚ DE QUIÉN ERES?
La verdad es que cada vez que abro la prensa, por fas o por nefas, me entra una depresión. Debo ser masoquista, porque a pesar de ello la sigo ojeando para ver qué niveles puede alcanzar la tontería humana. Hace unos días les conté el soponcio que me dió cuando descubrí que no estaba en la lista de los 100 hombres más atractivos del planeta. Confesé mi depresión y eso hizo que hasta los amigos me abandonaran.
Hoy abro el Diario y me encuentro con este titular "¿ Y tú de quién eres?" En principio pensé que me preguntaban si era del Barça, del Madrid o de la Ponferradina, luego, al leer la 'entradilla', ví que los tiros apuntaban hacia otro sitio. El articulista me había engañado, debería haberme preguntado "¿Y tú ,qué coño eres?"
Seguí leyendo y me enteré que en el proceso evolutivo del hombre habíamos cubiertouna etapa más: "homo habilis, erectus, sapiens, sapiens-sapientisimus, metrosexualis... y ahora übersexualis!" Y hasta daban la definición: "Uber, que en alemán significa 'superlativo', 'el mejor', es un macho que dedica más tiempo a ordenar sus ideas que su pelo. Él no necesita que otras personas le digan que es atractivo; lo sabe." ¡Y yo con estos pelos! Ya no daba la medida con el 'metro' y ahora enciman me piden que sea 'über', yo que sigo siendo 'puber', o como mucho 'agrosexual'.
Parece ser que estamos en manos de los publicistas y si no somos como Clooney, Banderas, Mc Gregor, Cliton o Zapatero no sólo no nos comeremos una rosca, porque yo me contento con una loncha de jamón, sino que no exitimos, no somos nadie, nada. O sea que me he cogido otra depresión de caballo, y ahora sí que no regreso ni a la etapa de 'Homo erectus', soy un 'Simiosexual...' guaaaa! (Menos mal que la Ley nos va a proteger).
Parece ser que es la última invención de Marian Salzman, vicepresidenta de la agencia de publicidad JWT, que hace dos años hizo famoso al hombre 'metrosexual', creado por el escritor inglés Mark Simpson en los años 90 y al que ahora pretende enterrar en su último libro, 'The Future of Men' (El futuro de los hombres).
Me apeo, no tengo futuro.
La verdad es que cada vez que abro la prensa, por fas o por nefas, me entra una depresión. Debo ser masoquista, porque a pesar de ello la sigo ojeando para ver qué niveles puede alcanzar la tontería humana. Hace unos días les conté el soponcio que me dió cuando descubrí que no estaba en la lista de los 100 hombres más atractivos del planeta. Confesé mi depresión y eso hizo que hasta los amigos me abandonaran.
Hoy abro el Diario y me encuentro con este titular "¿ Y tú de quién eres?" En principio pensé que me preguntaban si era del Barça, del Madrid o de la Ponferradina, luego, al leer la 'entradilla', ví que los tiros apuntaban hacia otro sitio. El articulista me había engañado, debería haberme preguntado "¿Y tú ,qué coño eres?"
Seguí leyendo y me enteré que en el proceso evolutivo del hombre habíamos cubiertouna etapa más: "homo habilis, erectus, sapiens, sapiens-sapientisimus, metrosexualis... y ahora übersexualis!" Y hasta daban la definición: "Uber, que en alemán significa 'superlativo', 'el mejor', es un macho que dedica más tiempo a ordenar sus ideas que su pelo. Él no necesita que otras personas le digan que es atractivo; lo sabe." ¡Y yo con estos pelos! Ya no daba la medida con el 'metro' y ahora enciman me piden que sea 'über', yo que sigo siendo 'puber', o como mucho 'agrosexual'.
Parece ser que estamos en manos de los publicistas y si no somos como Clooney, Banderas, Mc Gregor, Cliton o Zapatero no sólo no nos comeremos una rosca, porque yo me contento con una loncha de jamón, sino que no exitimos, no somos nadie, nada. O sea que me he cogido otra depresión de caballo, y ahora sí que no regreso ni a la etapa de 'Homo erectus', soy un 'Simiosexual...' guaaaa! (Menos mal que la Ley nos va a proteger).
Parece ser que es la última invención de Marian Salzman, vicepresidenta de la agencia de publicidad JWT, que hace dos años hizo famoso al hombre 'metrosexual', creado por el escritor inglés Mark Simpson en los años 90 y al que ahora pretende enterrar en su último libro, 'The Future of Men' (El futuro de los hombres).
Me apeo, no tengo futuro.
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