Hablar no es siempre 'comunicar'
Repasando lo que acabo de escribir sobre el arte de conversar, me ha venido a la mente el libro de Hugh Prather: " Palabras a mí mismo". En esta conversación consigo mismo, va más allá de lo que simplemente llamamos hablar, charlar, para acceder al fin último de toda conversación y que raramente logramos: "comunicarnos".
Releí algunos de los párrafos que tenía señalados y he pensado que podría ser útil volver a recordarlos.
Releí algunos de los párrafos que tenía señalados y he pensado que podría ser útil volver a recordarlos.
Helos aquí
- El núcleo de toda conversación es un llamado a la emocionalidad.
***
No quiero escuchar únicamente lo que dices.
Quiero sentir lo que quieres decir.
***
Quiero que seas capaz de decir cualquier cosa.
Incluso lo que no quieres decir
***
Si ignoro la demanda emocional y respondo sólo a tus palabras no habrá comunicación entre nosotros ni una corriente de comprensión.
***
Muchas conversaciones se desarrollan en dos planos uno verbal y otro emocional. En el verbal se encuentra lo que está permitido decir...
***
Para poder comunicarme tengo que hacer estas cosas:
darme cuenta de ti (descubrirte)
Hacer que te des cuenta de mí (descubrirme yo mismo)
Estar listo para cambiar durante nuestra conversación,
y estar dispuesto a revelarte mis cambios.
***
Si nos comunicamos realmente puedo aceptar que tu vida es distinta
y sin embargo participar de ella.
Y tú también compartirás la mía.
Saldremos de nosotros mismos y seremos algo nuevo.
***
A veces el silencio puede indicar confianza respeto mutuo
de nuestras diferencias.
Este silencio es una afirmación
de que ya estamos juntos como dos personas.
Las palabras pueden significar que quiero convertirte en mi amigo
y el silencio puede significar que acepto que ya lo eres.
***
Nos conocemos hace poco tiempo y te he mostrado lo mejor de mí.
Cuando me conozcas mejor verás
que puedo ser tan insensato como cualquiera
***
Hay algo en los halagos que me atemoriza.
Parte de la razón es que tengo miedo de recibir
Algo que después podría negárseme.
Si dejo que mis emociones se apoyen en las afirmaciones del otro
me estoy colocando en sus manos.
***
Cuando soy grosero estoy siendo algo
Más bien que diciendo algo.
***
Usando ese lenguaje atraigo la atención sobre mis palabras
y no sobre mis sentimientos.
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No quiero escuchar únicamente lo que dices.
Quiero sentir lo que quieres decir.
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Quiero que seas capaz de decir cualquier cosa.
Incluso lo que no quieres decir
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Si ignoro la demanda emocional y respondo sólo a tus palabras no habrá comunicación entre nosotros ni una corriente de comprensión.
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Muchas conversaciones se desarrollan en dos planos uno verbal y otro emocional. En el verbal se encuentra lo que está permitido decir...
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Para poder comunicarme tengo que hacer estas cosas:
darme cuenta de ti (descubrirte)
Hacer que te des cuenta de mí (descubrirme yo mismo)
Estar listo para cambiar durante nuestra conversación,
y estar dispuesto a revelarte mis cambios.
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Si nos comunicamos realmente puedo aceptar que tu vida es distinta
y sin embargo participar de ella.
Y tú también compartirás la mía.
Saldremos de nosotros mismos y seremos algo nuevo.
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A veces el silencio puede indicar confianza respeto mutuo
de nuestras diferencias.
Este silencio es una afirmación
de que ya estamos juntos como dos personas.
Las palabras pueden significar que quiero convertirte en mi amigo
y el silencio puede significar que acepto que ya lo eres.
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Nos conocemos hace poco tiempo y te he mostrado lo mejor de mí.
Cuando me conozcas mejor verás
que puedo ser tan insensato como cualquiera
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Hay algo en los halagos que me atemoriza.
Parte de la razón es que tengo miedo de recibir
Algo que después podría negárseme.
Si dejo que mis emociones se apoyen en las afirmaciones del otro
me estoy colocando en sus manos.
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Cuando soy grosero estoy siendo algo
Más bien que diciendo algo.
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Usando ese lenguaje atraigo la atención sobre mis palabras
y no sobre mis sentimientos.
"Palabras a MÍ MISMO " . Hugh Prather
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