La tristeza de tus ojos...

EXORDIO

Las impresiones no son diagnósticos, las imágenes pueden ser metáforas. Mezclar una ‘Impresión’:"efecto o sensación que algo o alguien causa en el ánimo”, con una 'Metáfora':"trasladar el sentido recto de las voces a otro figurado”, es la voluntad de dar cuenta de una ‘supuesta realidad’, observada desde cierta distancia, con una gran carga emocional.

Este exordio, es un a modo de precaución, para que no se tome al pie de la letra, lo que digan las palabras. Es verdad que cada vez que un náufrago ve este rostro en los escaños del Parlamento, siente una emoción confusa que va desde la indeferencia, una mezcla de compasión que no llega a la ternura, al tiempo que es como si viera el paso de ‘muchos’ años reflejado en un rostro, sin apenas expresión, unos ojos que se pierden en el vacío y una interna desolación que anidara muy dentro.

Se diría que la ‘Metáfora’ fuera el espejo de un país cansado, errante, perplejo, confuso, con una mirada perdida en un horizonte de niebla. Desearía íntimamente que tan sólo fuera la impresión de un náufrago. Y quiere creer que también hay muchas metáforas que anuncian primaveras. Nunca los otoños y los inviernos fueron eternos.

***

LA TRISTEZA DE TERESA

'Miré los ojos de la patria mía...'

¡Qué tristes estás, TERESA!
Tristes tus ojos están
Tras tantos tristes torpes trotes
Trasnochados.

Triste está tu rostro,
Tu mirada tierna, torva
Torna tu textura
Traspasada

Trabajada estás, trabajadora,
Trotamundos trajinando
Con tanto trasto trastornado
¡Qué triste es tanta tristeza!

Trajes que no transforman,
Tan sólo trampas travestidas
¿Qué haces con tanto trapo?
¿Travestirte, tristemente?

Traspasado me tienes
Tus tristes ojos me atraviesan
Transitan la travesía
De la Nada …Tras, tras…