" Parla català! "

No, no es más publicidad. Lo que pretendo decir aquí es la sensación que me ha dejado leer el comentario de una persona que vive en Cataluña, que, deduzco, trabaja en la enseñanza y refleja el callado cabreo que suscita en ella la 'sorna y la guasa' que utlizan algunos de sus compañeros o compañeras para desacreditar sus críticas. Habla de los feligreses de las 'nuevas religiones': lengua, patria, nacionalismo. Revela el 'miedo' a decir en alta voz lo que ella y muchos otros piensan, por miedo al ojo del Gran Hermano que todo lo vigila. Tiene que esconder su nombre, pedir permiso para expresar lo que siente... Hechos demasiado graves para correr velos o guardar silencios.

Hoy que se está celebrando el refrendo del Estatut quiero también pedir que ojalá, cosa que no creo, que ese instrumento sirva para que nadie se sienta extraño en esa tierra y que nadie le obligue a hablar la lengua que prefiera sin ser tachado de lo que ya saben.

Les invito a que lean su testimonio y luego decidan si eso es Democracia. Sólo eso.

Transcribo sólo en parte, alguna de sus frases. No indico la referencia al texto entero, porque ni la conozco, ni le he pedido autorización para hacerlo. Pero es un comentario que aparece en un blog de un conocido periodista que trabaja en RNE. He aquí algunos comentarios que hace 'Hera' , pseudónimo de la remitente:

" Necesito decir unas cuantas cosas y no se dónde y se me ocurre recurrir a su bondad para hacerlo. Es demasiada la complacencia, supongo que por desconocimiento, no por maldad (pero el resultado es el mismo) que muestran algunos hacia este nacionalismo.Y la sorna y la guasa que utilizan para desacreditar las críticas que se le puedan hacer, de forma que siguen dando alas a la sagrada religión de turno. Cada vez que escuchan una crítica, sacan a relucir la maravillosa convivencia,en la calle, de castellano-catalán en Cataluña; cosa que es cierta. Sólo un necio o un ciego lo negaría.También nos hacen mucho daño todos aquellos que diciendo parte de la verdad, la desacreditan utilizando el insulto. La verdad queda emponzoñada en su boca. . Unos y otros hacen mucho, mucho daño. Pero una cosa es la calle y otra muy distinta, y muy dura, la postura de la administración que a este paso acabará trasladándose a la calle. /.../

Me he tomado esta libertad, porque pienso que éste es un maravilloso espacio de comunicación de ida y vuelta. Y yo necesitaba hacerlo. Disculpe mi atrevimiento. Necesitaba compartir todo esto con alguien, que estoy convencida, hará un buen uso de esta información.
Un fuerte abrazo,"

¿Hay libertad para que 'todos'los ciudadanos de este país puedan expresar lo que piensan, sin miedo a que les identifiquen, y tomen represalias sobre ellos?