Greguerías
DE RAMÓN A MADOZ, PASANDO POR LA PARADOJA
De vez en cuando, si al abrir el periódico, uno se salta a la torera, el valladar de la gresca política, sus declaraciones, las miserias del mundo y demás ingredientes que producen hastío de tanto martilleo, uno puedo hasta encontrar algún rinconcito donde descansar y solazarse.
Ayer, por ejemplo, al Náufrago le contaron en una preciosa prosa poética, el último hallazgo sobre el gran Ramón. Al parecer, la hispanista Laurie-Anne Laget, profesora en la Sorbona, ha encontrado en la Universidad de Pittsburg (EE.UU.), una caja donde se reposaban 500 cuartillas, escritas por Ramón Gómez de la Serna bajo el título “Nuevas greguerías’. Según explica Laget, “Ramón escribía greguerías a diario y luego seleccionaba las que iba a enviar a los periódicos de Madrid y Argentina”.
La profesora hizo una selección, entre los millares de perlas, y preparó un libro que edita ahora La Fábrica, junto a quince fotografías de Chema Madoz. Feliz idea, pues de tan apropiado matrimonio, no puede salir más que una preciosidad de criatura o ‘creatura’. Si Ramón, en sus greguerías, es una mezcla de humor, poesía y disparate, Chema Madoz es el creador de sorprendentes y creativas greguerías en imágenes que se desdoblan, sin una palabra, en infinidad de nuevos mundos. Sus fotografías son paradojas poéticas, hechas de asociaciones de sorpresa. Ramón, a su vez es la paradoja, hecha creación, relámpago, ruptura, melancolía y revelación. Muchas de sus greguerías son imágenes en palabras:
De vez en cuando, si al abrir el periódico, uno se salta a la torera, el valladar de la gresca política, sus declaraciones, las miserias del mundo y demás ingredientes que producen hastío de tanto martilleo, uno puedo hasta encontrar algún rinconcito donde descansar y solazarse.Ayer, por ejemplo, al Náufrago le contaron en una preciosa prosa poética, el último hallazgo sobre el gran Ramón. Al parecer, la hispanista Laurie-Anne Laget, profesora en la Sorbona, ha encontrado en la Universidad de Pittsburg (EE.UU.), una caja donde se reposaban 500 cuartillas, escritas por Ramón Gómez de la Serna bajo el título “Nuevas greguerías’. Según explica Laget, “Ramón escribía greguerías a diario y luego seleccionaba las que iba a enviar a los periódicos de Madrid y Argentina”.
La profesora hizo una selección, entre los millares de perlas, y preparó un libro que edita ahora La Fábrica, junto a quince fotografías de Chema Madoz. Feliz idea, pues de tan apropiado matrimonio, no puede salir más que una preciosidad de criatura o ‘creatura’. Si Ramón, en sus greguerías, es una mezcla de humor, poesía y disparate, Chema Madoz es el creador de sorprendentes y creativas greguerías en imágenes que se desdoblan, sin una palabra, en infinidad de nuevos mundos. Sus fotografías son paradojas poéticas, hechas de asociaciones de sorpresa. Ramón, a su vez es la paradoja, hecha creación, relámpago, ruptura, melancolía y revelación. Muchas de sus greguerías son imágenes en palabras:
- “Los caballeros con gola llevaban la cabeza servida en un frutero”
- “Los tornillos son clavos peinados con raya en medio.”
- “Las latas de conserva vacías quedan con la lengua de hojalata fuera”
- “La lechuga es toda enaguas”
- “La T es el martillo del abecedario.”
- “Los paraguas están de luto por las sombrillas desaparecidas.”
View more presentations from Douce .
Comentarios