Uno de ternura
By DOUCE
Hoy ha llegado hasta la isla esta presentación. Mi papá, que en el fondo y en la superficie es un tierno, me ha encargado que traslade algo que se le ha ocurrido viendo estas imágenes. Yo podría hablar mejor que él de la ternura porque sé mucho más del asunto pero le haré caso, aunque sé que se quedará muy corto. Vamos a ver qué dice:
- En esta sociedad áspera donde la prepotencia, la altanería, el desdén, la desconfianza, la reserva se enseñorean del mundo de las relaciones personales, donde deseo se confunde con amor y donde a veces el amor se torna posesión, existe un sentimiento que se cultiva poco. Se llama ternura. La ternura se siente, surge espontánea y nada pide a cambio, tan sólo que el otro la acepte y la comparta. Es una sensación frágil e intensa, imprevisible, algo secreto en la que participan todos los sentidos. En la ternura participan la mirada, la caricia, la delicadeza, la dulzura, la atención hacia el otro: una mujer, un anciano, un niño, un perro, un pájaro, un ser desvalido…
La ternura no está de moda, es algo que a los hombres sobre todo les cuesta mostrar, como si fuera una muestra de debilidad, impropia de los varones. Sin embargo, el mundo sin ternura se convierte en un erial, adusto y seco. Ya lo decía Marie Laforêt cuando aún se estilaba un poco esta tímida y cálida emoción:
Casi sin un céntimo
… Pero vivir sin ternura
No podría, no. No, no, no
Se puede vivir sin la gloria
Que nada prueba
Ser un desconocido de la historia
Pero vivir sin ternura
Ni hablar de la cuestión
No, no, no,no
Qué dulce debilidad
Qué hermoso sentimiento
Esta necesidad de ternura
Que nace en nosotros
De verdad, de verdad, de verdad
Un niño os besa
Porque se siente feliz
Todas nuestras penas desaparecen
Los ojos se nos llenan de lágrimas
¡Oh Dios! ¡Oh Dios! ¡Oh Dios!
Faites donc pleuvoir sans cesse
Au fond de nos cœurs
Des torrents de tendresse
Pour que règne l'amour
Règne l'amour
Jusqu'à la fin des jours “
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