Paraíso laboral.

LA HORMIGUITA FELIZ

Esto de ser currante de a pié es una bendición del cielo, trabajas como un negro (con perdón, podía haber puesto como un chino, o como un español), casi llegas a dar de comer a tus hijos, pagas una hipoteca durante cuarenta años, te diviertes en tu trabajo, y llegas a casa más contento que unas castañuelas. Ser un trabajador es poder disfrutar de una vida placentera.

Si acaso tuvieran todavía alguna duda, vean lo feliz que vive la hormiguita de esta fábula.

Comentarios

Sylvia Otero ha dicho que…
Me recuerda a algo .....

Entradas populares