Mi paseo matutino, Douce

By DOUCE
Me encantan los paseos, ¡son una gozada! Son para mí un banquete de olores, me siento libre. Voy, vengo, me hago la despistada, pero si de verdad me despisto, busco como loca a mi papá.Entonces, él disfruta, porque ve que, aunque 'independiente', le necesito. Como él me necesita a mí. Somos 'necesitados' de oficio y no está mal... ¿Qué sería de nosotros si no necesitáramos a alguien o si fuéramos perfectamente 'prescindibles'?

Este paseo por mi parque preferido, me mola muchísimo. Hoy el mar estaba bravo y las olas rompían con fuerza, pero yo no soy de ruidos, ni de vista, soy perrita de olores. Y en el parque hay olores a montones. También me encuentro amigos. Hoy me he cruzado con varios. Algunos son demasiado grandes para mí. Si no estoy segura, prefiero esquivarles, o , a lo sumo, me vuelvo para mirarles una vez que ya han pasado.

Esta mañana conocí a Pancho. En cuanto me vio, aunque estaba lejos, dejo a sus papás y vino corriendo a saludarme... " ¡Pancho! ¡Pancho!", le gritaban, pero él, ni caso. Seguía con su trote hasta que llegó hasta mí. Hicimos el saludo de rigor , oliéndonos como Dios manda y luego jugamos a perseguirnos. Desde lejos seguían gritándole "¡Ven, Pancho!" Pero que si quieres... él no hacía caso. De repente, cuando ya se cansó de oler y de correr, pegó unos brincos y se dirigió hacia donde estaban los suyos. Tenía que atravesar un pequeño regato pero no podía. Buscaba por un sitio, buscaba por otro... y nada. Al final, hizo como hago yo cuando me pierdo, vuelvo por el camino por donde he venido.

En total, una mañana 'chupi'.

Comentarios

Entradas populares