Libros, descuentos , manipulaciones y otras caridades
Me he paseado estos días varias veces por eso que llaman Feria del libro ¡Y es que está tan céntrico…! En principio sólo me movía la curiosidad, ver las diferentes ‘librerías’, observar cómo todas, aunque fueran librerías ‘especializadas’, o en casi todas, había llegado la ‘invasión Zafón’, hasta el empalago o el hartazgo. No sé cuál de las dos impresiones resonaba en el espíritu del Náufrago. Le divertía observar el ir y venir de la gente, el trajín de cámaras y micrófonos tras los escritores ‘invitados’ y la preparación del reportaje. “Ahora, siéntate aquí en este banco… No, así no, algo más relajado… Coge el libro, por favor. Muéstralo a la cámara… Tú, (a la reportera) sigue preguntando…” Y el bueno del escritor, sentándose, levantándose, accionando, ensalzando lo laborioso de su trabajo que al final se había condensado en aquel tocho titulado: METODO PROFESIONAL PARA PREPARAR OPOSICIONES. Apasionante, a juzgar por el entusiasmo con que respondía a las preguntas de la entrevistadora.
Pero bueno, cotilleos aparte, lo que quería decir el Náufrago es que no acudía a la feria para comprar ningún libro. Suele ir con cierta frecuencia a su encuentro y no espera a que el libro venga a buscarle, aunque sea ‘menospreciado’ en un 10%. Así estaba en su ánimo, por eso podía pasarse hablando más de veinte minutos con una vendedora de facsímiles a precio módico. Pero sin saber por qué, quizá porque la chica del stand tenía una pinta medio hippy, pero cuidada, con su pañuelo de colorines en la cabeza, o porque la librería se llamaba Utopía el caso es que compró un libro de dos franceses, profesores universitarios ellos, que se han ocupado de hurgar en el asunto de un mundo donde proliferan los ‘manipuladores’ de todo tipo y un sin fin de ‘manipulados’, lo que no impide que a veces los manipulados ejerzan a su vez como manipuladores si la ocasión se presenta. La verdad que el título es un poco largo: “Petit traité de manipulation à l'usage des honnêtes gens”, traducido como « Pequeño tratado de manipulación para gente de bien”. Lo que no le gusta tanto al de la isla, además de un título algo enrevesado, es eso de ‘la gente de bien’. Todos podemos ser ‘gente de bien’ en algunos momentos y algo cabroncetes, por no pasar al segundo estadio, en determinadas circunstancias.
Sea cual sea el motivo, la invitación a la compra o el simple impulso, el caso es que el Náufrago abonó los 15’30 €uros del ‘petit traité’, con descuento, junto a la sonrisa amable de la ‘librera’ que le entregó dos vales para recibir sendos regalos del Ayuntamiento y de la Consejería de Cultura, siempre y cuando la compra total fuera superior a los 20 ‘doblones’. Con ese reclamo y la amabilidad de la joven, el Náufrago, de acuerdo con el título del libro que tenía en la mano “…manipulación para gente de bien”, se sintió ‘manipulado’ por el reclamo oficial y compró otro libro que encajara dentro de la oferta, por la parte inferior. Así que optó por uno de 7’60, que luego quedarían reducidos a 6’30 €
Acto seguido, con sus vales en la mano, se pasó por los dos tenderetes oficiales, donde además de dejarle escoger dos ejemplares más entre una serie de publicaciones del Ayuntamiento y la Consejería, había que añadirle, pósters, regalo de un número revista Municipal entre los sobrantes de las ‘tiradas’ que hacen los organismos públicos con el dinero de los contribuyentes. Total que se vio con sendas bolsas, cuatro libros, un póster y una revista sufragados por los ‘paganini’ antes citados.
Total, que volvía a casa con una sensación algo rara. Bastante satisfecho con los dos libros que había ‘utópicamente’ escogido, pero con una pequeña incomodidad por el 'despilfarro' de estas ‘caridades’ oficiales con el dinero de todos. ¡ Qué fácil resulta ‘manipular’ al ‘pagano’ con la falacia de que le ‘regalan’ lo que es propio! Por ejemplo, los 400 euros zapateros que según declaraciones del gobernador del Banco de España “no activarán el consumo” (¡Gran descubrimiento, vive el cielo! ¡Qué perspicacia!)
Pero bueno, cotilleos aparte, lo que quería decir el Náufrago es que no acudía a la feria para comprar ningún libro. Suele ir con cierta frecuencia a su encuentro y no espera a que el libro venga a buscarle, aunque sea ‘menospreciado’ en un 10%. Así estaba en su ánimo, por eso podía pasarse hablando más de veinte minutos con una vendedora de facsímiles a precio módico. Pero sin saber por qué, quizá porque la chica del stand tenía una pinta medio hippy, pero cuidada, con su pañuelo de colorines en la cabeza, o porque la librería se llamaba Utopía el caso es que compró un libro de dos franceses, profesores universitarios ellos, que se han ocupado de hurgar en el asunto de un mundo donde proliferan los ‘manipuladores’ de todo tipo y un sin fin de ‘manipulados’, lo que no impide que a veces los manipulados ejerzan a su vez como manipuladores si la ocasión se presenta. La verdad que el título es un poco largo: “Petit traité de manipulation à l'usage des honnêtes gens”, traducido como « Pequeño tratado de manipulación para gente de bien”. Lo que no le gusta tanto al de la isla, además de un título algo enrevesado, es eso de ‘la gente de bien’. Todos podemos ser ‘gente de bien’ en algunos momentos y algo cabroncetes, por no pasar al segundo estadio, en determinadas circunstancias.
Sea cual sea el motivo, la invitación a la compra o el simple impulso, el caso es que el Náufrago abonó los 15’30 €uros del ‘petit traité’, con descuento, junto a la sonrisa amable de la ‘librera’ que le entregó dos vales para recibir sendos regalos del Ayuntamiento y de la Consejería de Cultura, siempre y cuando la compra total fuera superior a los 20 ‘doblones’. Con ese reclamo y la amabilidad de la joven, el Náufrago, de acuerdo con el título del libro que tenía en la mano “…manipulación para gente de bien”, se sintió ‘manipulado’ por el reclamo oficial y compró otro libro que encajara dentro de la oferta, por la parte inferior. Así que optó por uno de 7’60, que luego quedarían reducidos a 6’30 €
Acto seguido, con sus vales en la mano, se pasó por los dos tenderetes oficiales, donde además de dejarle escoger dos ejemplares más entre una serie de publicaciones del Ayuntamiento y la Consejería, había que añadirle, pósters, regalo de un número revista Municipal entre los sobrantes de las ‘tiradas’ que hacen los organismos públicos con el dinero de los contribuyentes. Total que se vio con sendas bolsas, cuatro libros, un póster y una revista sufragados por los ‘paganini’ antes citados.
Total, que volvía a casa con una sensación algo rara. Bastante satisfecho con los dos libros que había ‘utópicamente’ escogido, pero con una pequeña incomodidad por el 'despilfarro' de estas ‘caridades’ oficiales con el dinero de todos. ¡ Qué fácil resulta ‘manipular’ al ‘pagano’ con la falacia de que le ‘regalan’ lo que es propio! Por ejemplo, los 400 euros zapateros que según declaraciones del gobernador del Banco de España “no activarán el consumo” (¡Gran descubrimiento, vive el cielo! ¡Qué perspicacia!)
Comentarios
Y cómo me suenan tus aventuras y desventuras de la Feria del Libro...sólo te falta ver a Boris y a la Lucía Etxebarría...
Siempre es gratificante compartir tus paseos, y es que hasta parece que me he puesto morenita sin salir de casa...incluso he sentido la brisa marina...
Felices sueños si no estás soñando ya...y me refiero dormido...
:)