Los sueños de Douce

EL SOL DE UNA MAÑANA DE INVIERNO

Área de descanso. Se ruega silencio...

Aquí estoy disfrutando del sol que se cuela por los cristales de la galería.

Me gusta este calor que me regala Febo y hace que sienta la cálida caricia de su fuego.

El suelo está fresco pero siento que mis ojos se entornan y me pierdo en el sueño.

Sueño con el paraíso de los perros, un paraíso de cariños y de sabrosos huesos…

Me gusta perderme en esos sueños.

Toda yo soy paz, reposo y felicidad perruna.

Si no fuera porque alguien ha depositado en el suelo un aparato negro…

… y ha interrumpido mis sueños.

Y ésta es una ‘amiga’. Tiene unos ojos muy bonitos, pero su mirada me da miedo. Al parecer no quiere ser mi amiga y cada vez que me ve, huye. Desde que perdí a “Calcetines”, el gato con el que jugaba, no he podido encontrar felino o felina que quieran ser amigos míos. ¡Qué pena! No hay nada peor que la ‘desconfianza’ y el recelo. Yo suelo correr detrás de todo lo que se mueve. Bueno, a veces corro, pero p' atrás, cuando tengo miedo.