La ‘agresión’, el agredido

LA 'CRISPACIÓN'

Portada de CRÓNICA (El Mundo)

Mucha tinta se ha vertido en estos últimos días sobre ‘la agresión’. Ha habido debates sobre un país en ‘crispación’, alusiones precipitadas que sonaban a augurios, encuestas varias sobre el mismo asunto, agresores que no fueron tales… Una nueva ‘españolada’ avivada por los medios y calentada por los partidos políticos. No se incidirá en esa palabra en esta isla.

Sólo un aspecto ha seleccionado el Náufrago, tras leer una 'Crónica sobre una agresión anunciada. Ni los ‘supuestos agresores’, ni los anuncios prematuros, ni los intercambios de responsabilidades, ni quiénes son los verdaderos autores… interesan, tan sólo la definición de un hombre

*que se define: «Soy una persona que vive eternamente en la preocupación, en la duda, que raramente tiene un momento de alivio»

*que escribe: «Lo puedo perdonar todo, pero que me robaran ese poema... Para mí fue brutal, una pérdida inmensa, como si me quitaran parte de mí».

*que confiesa: «Me siento lleno de mierda. Necesito escribir porque si no me voy a morir. La escritura es lo que me permite sacar la suciedad»

En esta isla sólo se hablará de eso y se leerán despacio estos...

AFORISMOS:

ODIO.
«Frente a los que gastan sus energías en odiar, los que hacen “economía de vida” en el olvido. No hay mayor maldición que no ser correspondido».

ÉTICA.
«En una sociedad tan poco dada a la autoconciencia, no cabe margen alguno para el reconocimiento de los propios errores. A lo sumo, sucederá que habrá quien admita haberse equivocado pero negando, sin embargo, haber hecho nada mal. Pura metafísica».

VERDAD.
«Hay más verdad en las despedidas que en las bienvenidas. La esencia del hombre es el adiós».

MIEDO.
«Curiosamente, vivimos en una sociedad en la que el único orden posible es el miedo; si no existiera este sentimiento, los ciudadanos no tendrían nada en común que garantizase su convivencia. Espeluznante».

REVOLUCIONARIOS.
«La palabra visceral y desmedida tiene un nacimiento intenso y glorioso y un devenir marcado por el seguro olvido».

ENEMIGOS.
«Para que alguien considere a otra persona como su enemigo debe profesar hacia ella un intenso sentimiento de admiración

YO.
«El problema es que nadie tiene necesidad de sí mismo. En una escala de valores, uno siempre se encuentra en los niveles de lo prescindible».

Pedro Alberto Cruz

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Referencia:CRÓNICA