Ingrid Betancourt
MUJER CORAJE
El Náufrago no ha podido por menos de emocionarse oyendo las palabras de Ingrid Betancourt después de casi siete años de su secuestro . Felizmente, tanto física como anímicamente parecía esa ‘mujer coraje’ de la que teníamos idea. Conmovedor el encuentro con su madre y con sus hijos.
Lejanas parecían las palabras de aquellas otras escritas a finales del año pasado: “Este es un momento muy duro para mí (...) piden pruebas de supervivencia a quemarropa y aquí estoy escribiéndote mi alma tendida sobre este papel (...) estoy mal físicamente (...) no he vuelto a comer, el apetito se me bloqueó, el pelo se me cae en grandes cantidades".
Y tras la liberación, ya están los políticos apuntándose puntos y barriendo para su casa. No les dejan ni unos minutos para saborear simplemente el sabor ‘a paraíso” del encuentro.
El Náufrago no ha podido por menos de emocionarse oyendo las palabras de Ingrid Betancourt después de casi siete años de su secuestro . Felizmente, tanto física como anímicamente parecía esa ‘mujer coraje’ de la que teníamos idea. Conmovedor el encuentro con su madre y con sus hijos.
Lejanas parecían las palabras de aquellas otras escritas a finales del año pasado: “Este es un momento muy duro para mí (...) piden pruebas de supervivencia a quemarropa y aquí estoy escribiéndote mi alma tendida sobre este papel (...) estoy mal físicamente (...) no he vuelto a comer, el apetito se me bloqueó, el pelo se me cae en grandes cantidades".
Y tras la liberación, ya están los políticos apuntándose puntos y barriendo para su casa. No les dejan ni unos minutos para saborear simplemente el sabor ‘a paraíso” del encuentro.
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