Pepito Grillo va en coche

— Crí-crí-crí!
— Chi è che mi chiama? — disse Pinocchio tutto impaurito.
— Sono io! —
Pinocchio si voltò, e vide un grosso grillo che saliva lentamente su su per il muro.
— Dimmi, Grillo, e tu chi sei?
— Io sono il Grillo-parlante, e abito in questa stanza da piú di cent’anni.
"Le Avventure di Pinocchio"

-¡Cri, cri, cri!
-¿Quién me llama? -gritó Pinocho lleno de miedo.
-Soy yo.
Volvió Pinocho la cabeza, y vio que era un grillo que subía poco a poco por la pared.
-Dime, grillo: ¿y tú quién eres?
-Yo soy el grillo-parlante que vive en esta habitación hace más de cien años.
Aventuras de Pinocho


La verdad es que el Náufrago no nació en la mejor época, suponiendo que haya una que sea la adecuada. Cada época tiene sus perendengues, y no se sabe cuál es la peor. La mejor, para los optimistas. Lo que quiere decir, me supongo, es que proliferaban los ‘ordeno y mando’, ‘niño, eso no se hace’, ‘ojito con lo que haces’, y ya, lo más grave, es que tenías hasta una ¡ ‘conciencia’!. La conciencia era ya la recoña. Se trataba de una señora quisquillosa, tiquismiquis, que todo te lo reprochaba y no te dejaba en paz. Normal por otra parte, porque todo eran órdenes, mandamientos, prohibiciones , leyes y castigos en caso de incumplimientos. Total, que andabas por el mundo, encogido, porque la dichosa señorita Rottenmayer no te dejaba vivir en paz. ¡Cómo han cambiado los tiempos! Los Pinocho son los que triunfan y Pepito Grillo no se como una rosca.

Pero digo mal, según el Náufrago – será gafe – tiene un Pepito Grillo en su coche que le pone de los nervios. Si no se pone el cinturón, empieza a hacer piii ,piii, piii... Si , tozudo , no le hace caso a la primera , sigue piando elevando cada vez más el sonido del pitido: piii ,piii, piiiiiii , con lo que no le queda más remedio que ponérselo. Póntelo... y pónselo a tu acompañante. Pero no es sólo eso, cuando ve que se le está acabando la gasolina, se le enciende la ‘conciencia’ correspondiente solicitando que se pase por la próxima estación de servicio. Entonces el Náufrago se remonta y tiene ganas de decir, al coche y a su conciencia:

- Pero. vamos a ver, ¿no os di de comer la semana pasada? Que si quieres arroz Gasolina, perdón , Catalina. Te muestra una pantalla donde se ve una gasolinera y un letrerito que dice algo así como “Nivel de carburante. Nivel...” Vale, tío, ya os he oído, no hacéis más que pedir , sois insaciables.

Ocurre lo mismo si por casualidad se ha dejado una puerta abierta. Venga a pitar y mostrando en la pantalla una puerta medio abierta. Pero el jodío grillo no te dice cuál es. Así que tienes que bajar del coche para acertar con la puerta mal cerrada. Siempre la última, claro. Esta mañana, cada vez que el Náufrago salía de un túnel, el Náufrago tiene especialidad en entrar y salir de túneles, el chivato le avisaba que la luz de cruce estaba jo....., estropeada. Total, que cada vez que subía al coche, o salía de un paso subterráneo el dicho aparatito le indicaba que no ‘estaba en regla’. Igual que la dichosa conciencia.

Ya no nos basta con que la DGT - nada menos que el “Gobierno de España”, actualmente - nos repita que ‘no pueden conducir por nosotros’, cosa que ya sabíamos. Habría que preguntarles cómo conducen o se conducen ellos, o por qué sigue habiendo puntos ‘rojos’, pasos a nivel sin señalizar, curvas mal trazadas, carreteras deficientemente señalizadas. Pero ellos parecen dispensados del Pepito Grillo de guardia, porque si tuvieran uno que hiciera saltar la alarma por cada error que perpetran,o mentira que cuentan, andarían con unas ojeras que se les caerían hasta los zapatos. ¿Cuándo habrá políticos, gobernantes y todos los que imparten orden o dictan mandamientos, que vengan ya con “Pepito Grillo” incorporado, de serie?

Comentarios

Entradas populares