Espejito, espejito...

REFLEXIONES PARA MÍ MISMO

Como recomendación primera, les aconsejaría que se saltaran esta entrada. En realidad lo que escriba el Náufrago sólo se lo creerá él mismo y aún así, tengo mis dudas sobre sus interpretaciones. Al fin y al cabo son sus sensaciones, y como suyas, de valor plural más bien dudoso.

¿Primera pregunta a sí mismo? Cuando vemos una imagen, publicidad, foto, cuadro, personas… ¿Todos sentimos las mismas sensaciones? Seguramente no. Cada cual a partir de su personalidad, su estructura emocional, su propia herencia y experiencias, sus gustos, sus filias, fobias, confianzas o temores, nos reflejamos. Nos vemos más a nosotros que lo que quizá trataron de obtener sus creadores.

Esta imagen que ven aquí, le ha aparecido últimamente varias veces al visitar una página. Esta mañana, al verla de nuevo, se detuvo un momento y reflexionó por qué cómo sensación global era más bien de rechazo que de aceptación, imagen y  mensaje. Se puso a diseccionar los elementos que intervenían y sacó algunas consecuencias:

• 1.- El primer rechazo global se lo produce  el volver a ver esta imagen quizá por excesivamente repetida.
• 2.- Sintió que varios de los personajes que aparecen, han perdido su simpatía, si es que alguna vez la hubo.
• 3.- Hasta la propia imagen del entrenador al que personalmente aprecia y respeta, pierde enteros al ver vendida su ‘imagen’ en decenas de anuncios publicitarios. Reconoce que debe de ‘aprovechar’ la circunstancia que atraviesa y que eso se difuminará sin que pase mucho tiempo. Quizá entonces le devuelva su hombre llano, sencillo, padre de un hijo especial.
• 4.- Lo que completa esta sensación global es que el Gobierno aproveche el triunfo mundial para asociarlo para ficharlos para el equipo “Ahorro-Energía”.¿Qué relaciona la luz, el agua caliente, la calefacción y la gasolina con el Triunfo Mundial?

Se podría seguir examinando por qué el Náufrago rechaza ciertas cosas, o no estima suficiente lo que trata de insuflar la imagen… ¿No será que se está retratando a sí mismo y los rechazos que a lo mejor involuntariamente siente le retratan?

Las interpretaciones serán múltiples, tantas como diferentes sean  los ojos que las miren.