Entre Monseñor de Balaguer, el de Palomares…

Y LOS ‘SEX-SYMBOL’

Íñigo de la Serna Alcalde de Santander

Puedo pensar que estamos en verano y hasta los columnistas ‘político-culturales’ arrumban por un momento sus ‘saberes’ clásicos, y buscan unas ‘columnas’ más de acorde con “El de ruido de la calle”, fresquito y minifaldero. Viene esto a cuento, o a lo mejor no, a propósito de la columna de don Raúl del Pozo: “Alcalde de Santander”. Aunque el Náufrago no sea santanderino, las decenas de años como vecino de esta ciudad se siente cívicamente de la casa. Fue leer ese título tan directo lo que atrajo su atención y le incitó a leer con más cuidado el artículo, en el que, si he leído correctamente, habla más de los dos ‘hombres-sándwich” del momento. Rajoy- Rubalcaba, o si prefieren, Alfredo y Mariano, ahora que está de moda utilizar más los nombres de pila/juzgado que los apellidos, según deseo de uno de los citados. Una argucia mediática más: nuevo ‘nombre’, política nueva. Al fin y al cabo en este mundo no se trata de lo que se ‘es’, sino de lo que ‘parece’. Como dice el articulista acertadamente: “Los electores también se dejan camelar por los sermones electrónicos”. Todo consiste en cambiar la albarda para que el burro, parezca otro. Perdón al asno por la metáfora.

Pero volvamos al principio que nos hemos desviado. El articulista, perro viejo en el oficio,  que se maneja bastante bien por donde se cuece el ‘guisado, ha descubierto que “Ahora se mira el pedigrí de los políticos como el de los perros; se mira su gancho, eso que los flamencos llaman ángel.” Y aquí es adonde se trataba de llegar para hilvanar con el principio: porque al ver el título "El Alcalde de Santander”, el náufrago de esta isla se puso en lo peor. No acabábamos de salir del ‘taxi y las anchoas’ del inefable Revilla, para volver a aparecer en prensas y pantallas sustituyendo al ‘mediático’ por lo del ‘pedigrí’. Lo que nos faltaba. Así lo presentaba el articulista:

“En el cuartel general de Génova me comentan: «Para cántabro y carismático, Íñigo de la Serna, el alcalde de Santander, que ha aumentado el voto y es el sex-symbol de las mujeres del PP». Las chicas del partido lo llevan en el móvil como antes llevaban a monseñor Escrivá o a Fraga, que follaba sin quitarse los calcetines.”

Fraga (sin calcetines)

Después de estos pensamientos tan profundos, nos quejamos de nuestros políticos, si ya desde los medios empezamos a simplificar y juguetear con estas cosas muy periodísticas. Conozco muy poco al señor de la Serna, no me parece que haga exhibición de ‘pedigrí’ y no le he visto muestras de sacar provecho del mismo. No conozco a ninguna ‘chica del partido’, ni cómo se llevan esas ‘cosas’ en los móviles. Lamentaría lo de los votos ‘sex-symbol’, pero siento aún más que desde los medios se haga propaganda, se difunda y contribuyan con su ‘gracia’ a crear estos estereotipos y modelos. Lamentablemente, así se simplifica nuestra vida y luego nos lamentemos de los resultados. No sé si las ‘chicas PP’ tienen noticia del 'pedigrí' de Balaguer y por lo que se refiere al de Palomares, sin bañador, y encima con calcetines, no debían de ser muy ‘sex-symbol’. ¡Qué cosas oye uno, por viejo