Dogday

By DOUCE

HOY ES MI DÍA

Vaya, parece que hoy es mi día, mi ‘Dogday’. Creo que mi papá ha leído mi entrada anterior y se ha dado cuenta de que no soy una Lewinsky cualquiera. “Douce, ven, he encontrado una noticia que te gustará”, me dijo esta mañana. Así que me subí al sofá, me senté a su lado y, juntos, leímos y comentamos la noticia. El titular, muy periodístico, decía: “Los perros del Refugio se bañan en el Sardinero”.

En realidad lo que pretendía era atraer la atención de los lectores, porque lo que de verdad había ocurrido ayer es que 12 perros abandonados, acompañados por 12 voluntarios se habían paseado por la playa exhibiendo una pancarta que decía: “En la playa también es nuestro amigo”. Al mismo tiempo reclamaban una legislación que permita acotar sitios en algunas playas donde podamos convivir perros, amos y bañistas como amigos.

Entre los ‘manifestantes’ que ayer se paseaban por la playa casi vacía por el mal tiempo, y que recorrerán Cataluña, el País Valenciano y algunas playas de Andalucía, estaba Steve, un cachorro mestizo encontrado en Madrid con sólo unos meses y ‘en muy mal estado’. Steve tuvo que ser operado y perdió un ojo. Ahora se encuentra muy bien y sólo espera un hogar que le acoja. Otra de las perritas que participa en la gira se llama Chufa y también fue abandonada siendo cachorro, en Valencia.

A mi que me gusta la playa porque puedo jugar con mis pelotas –una me la regalaron las olas - , hacer hoyos en la arena y meterme un poquito, poco, en el agua, tengo que aguantarme porque la mayoría de los días no puedo ir a la playa. Algunas veces, temprano, antes de que llegue la gente, mi papá me lleva a una cala algo apartada y aprovecho para disfrutar, pero con mucho ojo, porque hay personas a quienes les molestamos aunque no hagamos nada y avisan a la policía para que nos pongan una multa y nos echen de la playa.

Y yo pregunto, si hay playas para nudistas ¿Por qué no podemos ir nosotros que practicamos el nudismo integral desde el principio de los siglos? Si hay sitios acotados para que la gente juegue a las palas, o zona de juegos para niños ¿Por qué nos discriminan? ¿Por ser chuchos? Creo que es cuestión de buena voluntad y una pizca de tolerancia. Hay muchísimas cosas que molestan mucho más. En otros países muy cercanos, donde se nos considera mejor, existen normas que permiten que acudamos a las playas. Ya sé que siempre habrá cascarrabias a los que todo les molesta, quizá habría que buscar también una zona especial para ellos.

• “Permita a un perro en su playa”.
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  Foto: SANE