Discursos reales, cacerolas republicanas

LA ÚLTIMA 'OCURRENCIA'

Ayer por la mañana, el Náufrago, entre otras muchas cosas, porque su cabeza es una especie de olla donde se cuecen toda clase de emociones, pensó escribir sobre el mensaje navideño del Rey. Un mensaje que dejó de oír hace ya algunos años. Simplemente no pensaba, ni piensa, oírlo. No porque se trate del Rey, sino por su tono monótono y monocorde, como si fuera de plástico. Si no le apetecía escucharlo, es porque le sonaba a ‘déjà vu’ o ‘dèjà entendu’.

No son sólo los discursos del rey los que le aburren. Le pasaría igual si este tipo de ‘discurso’ lo hiciera el presidente Zapatero, que también nos hablaría del ‘viento’. Porque a eso suelen sonar todos esos discursos ‘presidenciales’: una especie de ‘flatus vocis’, de palabras vacuas, que no dicen nada nuevo, ni nada que valga la pena escuchar. Ya no escribirá el Náufrago lo que pensaba sobre esta ceremonia, cualquiera que sea el escenario. Eso es lo que pensaba hacer, pero desde que hubo leído en ‘Público’ -me refiero al periódico, no a ningún otro ágora- desistió de echar más leña inútil al fuego.

Al parecer, un grupo ‘anónimo’, ha invitado al personal a que se asome a la ventana esta noche, o salga a la calle a hacer sonar las cacerolas donde han guisado los pollos o los pavos de la cena, para pedir que llegue - ¡pero ya! – la III República, que nos liberará de todas nuestras miserias… ¡Y son tantas! Entre otras, esta sabia ‘ocurrencia’.

El Náufrago siente igual de simpatía por la ‘Monarquía’ como por la salvadora “República”. Nunca pensó que la República ‘hiciera’ mejores ciudadanos que esta Monarquía decorativa. Siempre creyó que son los ciudadanos los que deben estar maduros para uno u otro sistema de Gobierno, aunque sea una Anarquía bien llevada. Hay monarquías suficientemente democráticas y respetadas por sus pueblos, sin complejos y ‘Repúblicas’ estupendamente bananeras. Repásese la Historia, échese una ojeada a la Geografía. No es el ‘nombre’ de los diferentes regímenes los que crean ciudadanos, sino la madurez ciudadana de los mismos. Se puede ser muy ‘súbdito’ en un régimen de título ‘republicano’ y 'ciudadano' en algunas monarquías.

Nuestro país ya va derechito, por sí solo, por inercia,a su propio destino. No hay que forzarle mucho para acabar no sabe ni dios, cómo. Va él solito, sin necesitar que nadie salga a tocar las cacerolas. Pero estos ‘gestos’, siempre molan a los que le gusta 'significarse'. ¡Viva ‘esta’ república folclórica!

Comentarios

Sylvia Otero ha dicho que…
Nunca me tocó vivir en una Monarquía, pero estoy totalmente de acuerdo contigo.

Me encantó lo del flatus :-)

Besos,
Julio ha dicho que…
Hola Sylvia,

A mí tampoco me ha tocado vivir en una República. Sigo pensando que el 'nombre' de los regímenes que gobiernan o desgobiernan a los ciudadanos, no son los que los hacen mejores.

Desde mi punto de vista pienso que son los verdaderos ciudadanos, los que construyen y dan forma a los Gobiernos que deberían regirlos.

Que sigas disfrutando de estos días. Imagino que por esas latitudes serán más cálidos que por aquí. No obstante, he de decirte que este día de Navidad, aquí en esta ciudad del Norte, ha aparecido un día soleado.

El sol es un excelente animador y hay que agradecerlo.

Entradas populares