Se apagó la luz

... Y SE ENCENDIÓ LA VIDA



Se apagó la luz y se encendió
la vida,
y con ella se alumbraron
los recuerdos.
Allá donde el abuelo
pesaba el fruto del trabajo,
los bustos infantiles
de los que hoy alcanzan ya
los treinta años.
Con la luz se iluminaron
las viejas palmatorias,
candiles, candelabros
de no sé sabe qué altar,
las llaves que abrieron puertas
o baúles.
Fueron cinco minutos,
nada más,
cinco minutos, compendio
de una vida iluminada
por una vela
y un candelabro.
Nada menos.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
A nosotros, los cinco minutos, se nos hicieron hasta cortos.
Un saludo
pilar ha dicho que…
En casa apagamos hasta hoy.

Nos gustan las velas

Bicos
Anónimo ha dicho que…
Hola, Julio. Precioso y cálido tu texto. Después de un tiempo, y ciertas vicisitudes en lo personal, vuelvo a dejar mi huella en este blog, y compruebo con agrado que todo destila el buen gusto de siempre.

Confío y espero poder pasarme con más frecuencia. Ah, eso sí, a partir de ahora, como feliz funcionario en prácticas :-)

Un saludo,
Anónimo ha dicho que…
¡Enhorabuena!, José María. Mi Felicitación.

Sabía que era tu deseo esa estabilidad que para ti supone lograr algo por lo que has luchado.

Sé que eso te servirá para trabajar más tranquilo y de paso poder dedicarte a tus aficiones.
Anónimo ha dicho que…
Pilar, Iván

Quizá la crisis tenga un lado positivo, y es el experimentar que podemos vivir también sin tantas cosas 'necesarias', no impide que podamos disfrutar de 'otra manera' las oportunidades que nos ofrece la vida.

Algunos conocimos muchas horas de 'velas y carburos' y saboreamos 'veladas'felices sin teles, ni radios.

Entradas populares