Sin rumbo

LA CARTA ESFÉRICA

Pinchar en la foto para ampliarla
J.L. el ‘homeless’, parece que ha encontrado un lugar donde pasar estas noches veraniegas si no se lo impide la lluvia del Cantábrico. Poco a poco, sin saber cómo o quién, ha cambiado sus cartones por un colchón en relativo buen estado, ha encontrado una especie de cojín que hace las veces de almohada y toda una serie de piezas de tela que hacen las veces de sábanas, mantas o edredones, exagerando. Ahí pasa las noches, alternando con la marquesina de la parada del autobús cercano en caso de lluvia.

Contra la valla del mini parque ha arrumbado sus cajones donde guarda sus ‘misterios’, protegidos por un paraguas por si acaso la lluvia llega, intempestiva. J.L., el sin techo, por el que nadie, familia, servicios sociales, policías, fiscales “pueden hacer nada” y al parecer él mismo no acepta ayuda, pasa una buena parte del día en su nuevo ‘chalet’ de verano, sin muros, puertas o ventanas, rodeado de abetos, hayas y alguna encina. Los alrededores están salpicados de bolsos, botellas de agua o leche, cestas de frutas y verduras, revistas, o folletos publicitarios…

Hoy, cuando el Náufrago fue tras Douce, su perra, que tiene una especial querencia hacia el rincón donde J.L. tiene su ‘parcela’, observó que en una esquina del colchón había un grueso libro. Se acercó y la sorpresa fue grande al ver la portada de “La carta esférica” de A. Pérez-Reverte. Alguien ha difundido que J.L. tiene estudios y hasta diplomas universitarios y que algún día su cabeza dio un vuelco y su mente derivó en el género de vida que ahora lleva y para la que, al parecer: “No podemos hacer nada”. Siempre es la misma cantinela cuando requieres ayuda a servicios sociales, autoridades u otras asociaciones…

Mientras, J.L.,desnortado, busca su rumbo  en la “Carta esférica”

Comentarios

Entradas populares