La provocación rentable

PROVOCAR POR EL PLACER DE PROVOCAR

Quizá lo peor de este mundo nuestro es que nos hemos quedado sin ‘referencias’ y andamos a la deriva. En poco tiempo hemos pasado de los dogmas, las leyes, los mandamientos y las prohibiciones, a un mundo sin reglas, sin límites, sin metas y sin lindes que nos ubiquen. No sabemos quiénes somos y sobre todo ignoramos qué o quién queremos ser.

Vagamos ‘des-orientados’ porque hace tiempo que hemos perdido nuestros puntos cardinales. La paloma al menos se ‘equivocaba’, en vez de al norte iba hacia el sur, nosotros no sabemos hacia dónde vamos. No sólo hemos matado al Dios que nos enseñaron que tenía mucho de prohibición, de fanatismo, de juez adusto y severo . Al pretender deshacernos de Él, hemos matado también lo que el hombre buscará siempre cuando busque la imagen de lo Bello, lo Justo, lo Amable, lo Amante.

A veces en nuestro afán iconoclasta llamamos Arte a lo que es simple provocación. Es cierto que en el arte hay algo de rompedor, de abrir nuevos caminos, de transgredir, en el sentido etimológico de ‘ir más allá, más lejos’, pero no podemos decir que la mera ‘trasgresión’, la pura provocación sea por ella misma Arte. El arte está llamado a transcender la simple provocación si no quiere ensimismarse y sobre todo si en esa trasgresión hay una voluntad tácita o explícita de herir sentimientos, creencias íntimas. Y esto es lo que a mi entender a hecho la Consejería de Cultura de Extremadura subvencionando con el dinero de todos el ‘material artístico’ de alguien al que no voy a hacerle propaganda gratis, aunque quizá sea su fin cuando muestra determinadas imágenes que parecen nacer de una mentalidad obsesionada, traumatizada, enferma.

Puedo admitir muchas ‘libertades’ pero quiero permitirme al menos marcarme el límite que hay entre ‘creación’ y mal gusto, entre trasgresión y respeto, entre sexo y pornografía. Que el autor de estas imágenes se pague su libro con sus ‘fotos artísticas’ y se lo compren sus amigos y aquellos que quieran destruir a sus ‘demonios lares’, me parece muy bien, si eso les sirve de cura. Que se subvencione con dinero público que premia a sus amigos, me parece pornográfico, en el sentido más prostituído de la palabra.

Me parece de una cobardía, de una falta absoluta de criterio si no fuera de burla, tomadura de pelo o imbecilidad natural que se ponga en el prólogo: “singular contenido” de la obra o “ compromiso de divulgación sin entrar en otras cuestiones siempre subjetivas” como dice el ilustrísimo Consejero extremeño Francisco Muñoz Ramírez. Es lo que handicho todos los Poncios que se lavan las manos que en el mundo han sido.

Una nota más. Si ‘sinnorte’ ni ‘sinsur’ andan los consejeros , no les digo nada los comentaristas de la ‘exposición’ a la que, por mi parte, no le haré más publicidad. Creo que ya le he concedido más importancia de la que se merece, pero quería expresar lo que siento ante la falta de criterio que nos asola , quizá más grave que las fotos en sí. Allá los ‘gustos’ de cada cual, pero por lo menos hay que tener los propios y saber a qué se deben.

Comentarios

Escritor en el Tejado ha dicho que…
Yo tampoco he querido hacerle publicidad al asunto en La Rueca, si bien he entrado en la página del autor y me ha costado un disgusto mayúsculo.

Visto a dónde va a parar el dinero de mis impuestos, y de los suyos, y de todos los españolitos, cada día estoy más a favor de la insumisión fiscal.

¿Me subvencionaría alguien un libro de fotografías de la madre del autor de marras fornicando con Ibarra? También es arte.

Aunque supongo que un tipo así es de los que venderían a su madre por una subvención. Así que no le voy a dar el trabajo hecho.

"Perdónalos, porque no saben lo que hacen".
Escritor en el Tejado ha dicho que…
Este comentario ha sido eliminado por el autor.

Entradas populares