Del Náufrago y su supina ignorancia

DE ‘BOSONES’, ‘LICUACIONES’ Y OTRAS REALIDADES

Estaba esta mañana el Náufrago tratando de internarse en la ‘meta-física’, es  decir ‘más allá de lo físico’, cuando tropezó con su ignorancia incapaz de entender varias cosas llamadas ‘físicas’, o para ponernos al día, física cuántica que no es igual a cuánta física nos rodea. Era a propósito del dichoso ‘bosón’ que etimológicamente no significa nada y para más confusión le han puesto el mote de ‘partícula de Dios’ y ya armamos el lío. O es ‘cemento’ de otras partículas, o como concluye mi ‘amigo’ Cuartango “una partícula elemental sumamente inestable que cohesiona la masa y que está  presente  en las otras partículas”. Él defiende que ya Leibniz  hace siete siglos había descubierto las ‘mónadas' unos elementos “que no tienen ventanas”. Como demasiado pan para un pájaro. O sea servidor.  Así que dejé  a Pedro G. y le di los buenos días,

'Busones' en un 'Mundo líquido'. DOUCE
No contento con eso, resulta que se topó con el filosofo-sociólogo Zygmunt Bauman que en estos días anda por estas tierras cántabras impartiendo sus saberes  sobre este “Mundo líquido” que atraviesa un ‘interregno’ entre el mundo  de los últimos treinta años y el porvenir: “El Mundo Antiguo y lo que surja, si es que surge", porque él es sociólogo, filósofo y ensayista, lo que no tiene es el título de ‘profeta”.

Tal es la 'licuidad' de este ‘interregno’: ha asegurado – y ya es asegurar- que “la única certeza que tenemos es que vivimos en una época de incertidumbre” y ha destacado que, “como ciudadanos, tenemos la impresión de habitar en un mundo en el que todo puede ocurrir” y eso conlleva una “pérdida de la seguridad” y acarrea “consecuencias sociales, políticas y económicas”. ¿Qué tal les queda el body? De todas formas el viejo sociólogo ofrece sus reflexiones  sobre la manera  en que los ciudadanos  de este mundo líquido e inestable debemos afrontar la que nos llueve encima.

La tercera realidad que se le escapa al Náufrago y que le recordó la ‘licuidad’ de este mundo en que  braceamos, fue algo que vio más netamente en la oscuridad del odio. Nihil Nuovo  si retrocedemos quince, veinte, treinta, cuarenta, cincuenta años  atrás. Vean, piensen, abramos los ojos en este mundo más que líquido en continua efervescencia.

Sólo hay algo sólido en esta Isla: la ‘LEALTAD, el AMOR, la COMPRESIÓN, la LIBERTAD, el RESPETO, la PAZ, la COMPAÑÍA, el CARIÑO, la ACEPTACIÓN, la NO QUEJA. Afortunadamente, no es un Hombre, es un PERRO quien lo practica.


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