Salamanca de noche
DE VUELTA A CASA
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| La Plaza en fiestas |
En estos días de fiesta no encontró su casa entre tanto festejo y bullicio que quizá agobiara un poco aún más que el calor de los últimos días del verano. La 'casa' se hizo más 'Casa' cuando durante dos noches paseó por sitios solitarios, callejuelas, barrios 'prohibidos' en su infancia, donde la ciudad se tornaba oscura y misteriosa para la gente menuda.
Ahí, lejos del barullo y del ruido festivo, duermen apacibles esas callejuelas, esos huertos que dan al río, junto a la vieja muralla desde donde se divisa una línea quebrada de torres, cúpulas, espadañas, con un fondo intenso de oscuridad y luna llena. Pasearse en solitario, recorrer jardines, rúas, plazas, antiguas cuevas de extraños personajes, cuando aún no se han ido los calores es toda una lección y extrañas emociones.
Quizá sea lo que ha hecho al Náufrago, enraizarse más en su verdadera casa, como si formara parte de sí mismo, siendo de todos los que de 'la apacibilidad de su vivienda hayan gozado'
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Comentarios
Dentro de una ciudad en fiestas hay muchas maneras de disfrutarlas. Hay gente que se siente feliz y acompañada viendo calles y plazas llenas de gente aparentemente feliz y se contagia.
La ciudad se viste de 'gala' y ofrece a sus vecinos un amplio abanicos de festejos: conciertos populares, exposiciones, casetas de vinos y acompañantes, espectáculos taurinos, concursos varios… Las noches se alargan y esa Plaza de todos se hace aún más cosmopolita...
La gente converge en la fiesta y el ruido. Hay otra parte de la ciudad más íntima que ofrece la apacibilidad de su vida de años por donde han pasado millones de estudiantes, profesores, sabios o alcahuetas.
Como decía el otro: 'Hay gente p'a tó' , para todos los gustos y cada cual escoge y alterna.
Gracias por pensar en nosotros.
Qué bonito es verla siempre, nunca me canso de Salamanca, jamás podría.
Nos gusta hablar de las cosas que amamos, y nos viene bien. A veces también nos precipitamos a la hora de escribir.
Buenas tardes desde este lado del océano.
Es una manera de seguir seduciendo a los que han acudido a visitarla o viven ya en ella.
Ya sé que es una ciudad que amas. Se lo merece y a todos acoge.
Una casa para siempre. La que vio a uno crecer...
Bonitas fotografías.
El poder volver de vez en cuando es también una manera de sentirla siempre con nuevas sorpresas.
Esas fotos son otras tantas miradas 'nuevas' cuando las hice y cada vez que vuelvo a verlas.
Gracias y celebro que te haya gustado esa ciudad como en la ciudad que vives.Las ciudades como los países no pertenecen en exclusiva a los que allí nacieron. Son de todos los que lo deseen.