La escapada

La Plaza estaba esperando

Habían pasado treinta y ocho de días –tuvo que contarlos – porque eran   bastante y no los había contado. Sólo sabía que fue un jueves de octubre cuando ‘aquello’ ocurrió y pasaron unos días inmóviles.  Luego, poco a poco se levantó apoyándose en  sus muletas. Aunque molesto, se adaptó a la situación y un sillón benévolo le ofreció  su asiento. Así pasaron los treinta y ochos días, pata arriba y el amigo ofreciendo su trono.

Pero eso ya ha acabado en buena parte y le han permitido que ya su bota le ayude a  caminar apoyado en un bastón. Esta mañana un tanto gris, sin dar demasiado noticias, él, se armó de  su bastón, su bota, su cámara y quiso reconocer la calle. Había sido bastante tiempo sin ‘VER’  las pequeñas , grandes  sensaciones que se topan en la calle. Caminar para ver, para sentir, para encontrarse con una sorpresa. Y así fue el paseo: una bocacalle, una  guitarra y una  silla  vacía, un escaparate, un belén en lo que fue un mercado, grupos de  abuelos cobijados en el mismo lugar protegiéndose de la lluvia, un niño ensimismado en un escaparate lleno de figuritas de belenes…


La Plaza estaba  vacía y parecía  ensanchada, las calles con gentes de idas y venidas  y ya cubierto el paseo  buscar un taxi.  No había ninguno, camino de la Diputación grupos varios iban manifestando sus  quejas, sus cantos y algunas jaculatorias: “Emplea TU Fuerza, vamos a cambiar las cosas”, “Unid@s contra los recortes y por la Democracia no debemos, no pagamos #.

Terminado el desfile, apareció un taxista  y se acabó su paseo que resultó como lo deseaba


Comentarios

Lúa ha dicho que…
De nuevo con los pies en suelo, eh ¿Nau? Me alegro mucho, de verdad.

Estupendo recuerdo de hace ahora cuatro años, recorriendo esas calles entrañables con agradable compañía. Hasta el viento era cálido, con una temperatura casi primaveral. No como aquí que sopla a más de 100 Km/h y tenemos una sensación térmica de -1º.

¡Miauuusss cariñosos!

Douce ha dicho que…
Gracias Lúa

Sí, el proceso afortunadamente sigue su ritmo. Podemos caminar con la bota si salimos fuera y procurar caminar por casa sin necesidad de bota.

A partir de ahora, espero que empiece la semana próxima una temporada de rehabilitación.

Durante estos treinta y ocho días también lo he aprovechado para ocuparme de varias cosas. De todo se puede aprender muchas cosas y las hemos aprovechado.

Os agradecemos mucho todos vuestras palabras de ánimo que son tan excelentes como la ayuda de los médicos.

La 'escapada' de hoy me ha servido mucho. Douce y Berta han colaborado como ellas saben:

Guauuuus cariñosos. Gracias
Campurriana Campu ha dicho que…
Me alegro de esa mejoría. Poquito a poquito se va haciendo el camino...
Un abrazo, Nau.
Otro a estas perritas tan guariñosas.

Entradas populares