"Oye, tu crees en Dios?"

CONFIDENCIAS

¡Ah, yo creo que ya creo...! Gracias, Benedicto

Cuenta hoy Pedro Jota en su carta dominical una aparente ‘simple’ anécdota que desvela más realidades de las que hemos vivido siete años y seguimos viviendo. Dice el periodista que la primera vez que fue invitado a compartir cena con el entonces reciente presidente, señor Rodríguez Zapatero, la primera pregunta que le espetó, después del saludo fue: «¿Oye, tú crees en Dios?» ( ¡??!... segundos de sorpresa y duda). Lo primero que le venía a la mente eran respuestas como: « ¿y a ti qué te importa?», «eso forma parte de mi intimidad» o el «no hablaré si no es en presencia de mi abogado»… Pero no le dio tiempo a razonar y al ver que la respuesta no llegaba prosiguió su ‘confesión’: “Es que yo no creo… ¿sabes?». 

La auto respuesta no se sabe si cándida, exhibicionista o profética, marcaba ya un objetivo primordial en su programa de gobierno. No hace al caso que la respuesta de Pedro Jota fuera: - “«Si no tuviera más remedio que responder a esa pregunta, te diría que no lo sé» pero sí le dio pie al flamante anfitrión para seguir profundizando en su hoja de ruta: una democracia ‘buenista’ y ‘bonita’ donde iba incluido ‘liberar’ a este pueblo ‘atrasado’ de su dependencia de la Iglesia católica.

Una frase, un proyecto que definían con claridad la más supina ingenuidad, su fanatismo: todo el lastre, todas las limitaciones, todos los impedimentos para dirigir a un país ‘plural’, de sentimientos diversos, hasta ‘encontrados’…

Han transcurrido siete años desde aquel “Es que yo no creo… ¿sabes?”. Quizá hubiera sido mejor cambiar la frase. “Es que no sé… ¿no crees?” 

• Referencia: "EL Oso y el Papa