Soy un cerdo

CHANCHULLOS Y PANDEMIAS

¡Hola! Pues sí, soy un cerdo, un puerco, un gorrino, un marrano, un chón, un gocho, un guarro, como quieran llamarme. Que unos llevamos la fama y otros son los que de verdad cardan la lana y más cosas. De momento debo mantener mi anonimato, así que no les diré ni mi nombre, ni mi DNI, sólo les puedo decir que pasto y como bellotas en una de las dehesas salmantinas, pero sin domicilio fijo. Añadiré a mi presentación que pertenezco al FECIB (Federación Española del Cerdo Ibérico). Como miembro de esta federación recibo información confidencial de nuestros infiltrados en el Pentágono, FBI y otras instituciones similares. Por este motivo dispongo de datos fidedignos sobre este chanchullo que se ha montado con esto de la mal llamada Gripe Porcina. Somos cerdos, pero no somos tontos, por eso disponemos de nuestro propio Servicio de Inteligentia, que fue el que nos adelantó que estuviéramos preparados, que iban a por nosotros.

Pasada la legionella, las vacas locas, la gripe aviaria, el dengue, el anisakis y demás pestes querían que fuéramos nosotros los que pagáramos el pato, la vaca, las gallinas y demás gremios animales. La Inteligentia americana, que dicho sea de paso es bastante tonta, se puso de acuerdo con la industria Farmacéutica para matar dos pájaros (o dos cerdos) de un tiro: echar una nube de humo sobre la famosa Crisis y por otro que se forrase el gremio farmacéutico. De este modo, mientras el personal sienta el canguelo con la dichosa pandemia, se olvidará un poco de la Crisis, el paro y sus consecuencias, por otra parte las firmas farmacéuticas como la mafiosa Baxter & CIA se pondrían las botas vendiendo antivirales a todo pasto, nunca mejor dicho. En el macabro contubernio el 40% de las ventas iría a engrosar las arcas gubernamentales para ir tapando agujeros y dar más pasta a la Banca. De nada sirvió la protesta de la industria armamentística, que tendrá que contentarse por ahora con los afganistanes, los iraks, israelo-palestinos y demás conflictos, a la espera de otros, según convenga.

Como cerdo y representante porcino, estoy que muerdo, porque siempre pagamos los mismos. Y ahí tienen a los islamistas radicales y a los judíos de gorro (kiphá), que nos la tenían jurada y han empezado a cargarse a centenares de miles de congéneres, so pretexto de que somos unos ‘impuros’. A saber lo que son ellos. ¿Y qué decir de los rusos que también han aprovechado la ocasión, para barrer para casa y proteger la ganadería autóctona, se han puesto ‘chechis’ y ¡hala! a cerrar la puerta a chorizos, jamones, salchichones ibéricos y no preocuparse de los ‘chorizos’ que tienen en casa y repartidos por el mundo?

Les aconsejo que mantengan los ojos bien abiertos y no se dejen engañar. Y si quieren protección, manden a tomar por saco a los antivirales y recurran a la Plata coloidal o a la semilla de Pomelo que son potentes antivirales y no tienen efectos perjudiciales para el organismo humano como sí lo tienen los antibióticos y los antivirales de la medicina oficial.

Salut y força al canut!