Habla DOUCE, la sedante, sedente

No sé si echarán de menos mis ‘crónicas’, tampoco es que me importe demasiado, aunque para decir la verdad , me gusta que me lean. Lo que ocurre es que últimamente mi papá no me deja sitio en ‘su’ bitácora, porque debe estar ocupado con eso de la homeostasis o como demonios se llame, porque cuando se pone cursi no hay quien le aguante. Bueno, sí lo sé: Yo. Y últimamente recurre más a mí que en los meses pasados tan ocupado en sus baños, visitas y otras cosas.

Con la vuelta al ‘cole’, ha vuelto a echar mano de mí porque dice que le sirvo de sosiego y relajación. Se pasa el día mirándome dice que le transmito unas ‘vibraciones’ – otra vez la cursilada – que le aportan serenidad, equilibrio, calma, emociones tranquilas.

- “¡Coño, le digo yo, ahora va a resultar que tengo efectos curativo-emocionales!”

Sólo falta que aparezca por ahí cualquier firma de éstas que venden ansiolíticos, tranquilizantes , o que su médico de cabecera le hubiera dicho: “ Si algo le altera o se siente ansioso , tómese una pastilla DOUCE en desayuno , comida y cena. Y si viera que no es suficiente la dosis , puede aumentarla porque no tiene ningún efecto secundario.” Y él tan contento, porque de esta forma puede tomarse sus copitas de vino con la comida , que le encanta , porque yo soy compatible, y no otras medicinas.

Y aquí me tienen. Se pasa ratos mirándome mientras yo descanso, porque el verme dormir y observar mi respiración ,dice que le relaja muchísimo, que es tranquilizador mirarme porque transmito la sensación de no tener más preocupaciones que la de comer, descansar, desear que me acaricien o que me saquen de vez en cuando de paseo. Hay momentos que yo le miro y es como si viera que él percibe no sé cuántas cosas en mí y me habla. Alguna vez Teresa o cualquier otro de la casa, al oírle hablar , piensan que está hablando solo y se ponen ya en lo peor:

- “Papá, ¿pero tu estás bien? ¿Hablando con la perra?”.

Por una parte la comprendo, pero por otra me molesta un poco. ¡Como si no se pudiera ‘hablar’ conmigo! Cuando soy yo a quien recurre todo el mundo cuando tiene algún problema de comunicación, y me cogen en brazos, cuando yo no quiero, o me acarician cuando yo si se lo pido, porque a ellos también les gusta que yo me deje acariciar y les sirvo de comunicación táctil y afectiva , cosa que deberían utilizar más entre ellos, pero les da corte mostrar sus sentimientos.

Sé también que estos días está más afectuoso conmigo porque ha visto unas imágenes en la tele que no ha querido enseñarme. Pero ayer le oí hablar por teléfono con una señora de no sé dónde , diciendo que un tal "Lado" merecía no sé cuántos palos porque había pegado a alguien, y le notaba muy enfadado cuando la señora le decía que no entendía por qué la gente se había puesto así, que el ‘señor’ ése, quien fuera, tenía merecido que la gente afeara su conducta y unas cuantas cosas más.

Por eso, y porque me gusta que me mire cuando yo le miro, y porque me gusta leer en sus ojos lo que le pasa, y , también, porque me saca de paseo, me concede algún capricho que otro, me permite ir a mi bola cuando salimos, por todo eso, le permito que yo sea su sedante, su barbitúrico, su ansiolítico y todos los ‘icos’ que quiera.