Cómo nos ven desde el otro lado
Esta mañana me pasé por "Cantabria Acoge" (una organización que se ocupa de los inmigrantes de esta región).Había quedado con el Administrador/Secretario/Chico de los recados y otros cargos, para hablar de las noticias que teníamos que publicar en el próximo boletín semanal. Coincidió que estaba allí una mujer joven ,colombiana, con un texto que tenía interés se publicara en el blog de la Asociación. Me encargué de pasarlo a 'limpio' para publicarlo, sin haber leído aún el contenido.
Al llegar a casa lo leí y me hizo reflexionar sobre cómo percibimos y cómo nos perciben unos extranjeros que son como hermanos nuestros. Creemos conocerlos , sin darnos cuenta que hay muchas actitudes y comportamientos nuestros que pueden resultarles chocantes. Transcribo sus impresiones porque me parece que merece la pena una reflexión por nuestra parte.
LA MUJER LATINOAMERICANA
Teniendo en cuenta que cada ser humano es único e irrepetible, voy a intentar responder a algunas inquietudes que flotan en el aire.
De la mujer latinoamericana se dicen muchas cosas, todas diferentes. No es que todas seamos iguales, pero así como hay un prototipo de mujer española que casi nunca se ajusta a la realidad. Hay uno de la mujer hispanoamericana y lo que se dice de nosotras tampoco es real. Y claro , salimos muy mal paradas. ¿Cómo somos las latinoamericanas? Los medios de comunicación , la publicidad y nuestros culebrones son, en parte, responsables de la imagen que hoy tienen de nosotras.
Os lo demuestro. ¿Cómo imagináis que es la vida cotidiana en el Caribe? Playita, chicas ligeras de ropa dorándose al sol, pobreza, simplicidad y mucha alegría, lo único cierto es que los caribeños son alegres, el resto pertenece a la imaginación del publicista... “si nos tomásemos la vida en serio como en el Caribe?”
Nuestra alegría confunde, como si para ser una persona seria y responsable hiciera falta andar todo el día con el ceño fruncido, con cara de enojado. Tampoco nos parecemos a los personajes de nuestros culebrones, eso es ficción, está creado para entretener y sólo tienen de la vida cotidiana el acento hispano, lo demás pertenece a la caja boba.
Se dice también que las mujeres inmigrantes son todas... ya lo sabéis, trabajadoras del amor, y es que a lo mejor confundís la alegría en el vestir y el hablar dulce con otra cosa. También nos gusta la economía, la medicina, el periodismo, el arte, en fin. Aunque os parezca extraño, ¡somos como vosotros!
De nosotros se dice que estropeamos el mercado porque aceptamos salarios más bajos ¿Y no será que lo aceptamos así porque no nos quieren pagar más? Igual que en el caso de la mujeres ¿pensáis en general que les hace gracia ganar menos por la misma tarea que los hombres?
Por naturaleza somos cariñosas, nos gusta que quien esté a nuestro lado se sienta bien, pero eso os confunde, lo sentimos, somos así, sin explicaciones. Al igual que nos gusta ir arregladas, para vosotros en exceso, o cuando pensáis que queremos ligarnos a todo el que se cruza con nosotras y lo que sucede es que sólo estamos siendo como sabemos ser. En general somos suaves de trato, a algunas se nos contagia eso de ir gritando y diciendo palabrotas, pero cuando estamos recién llegados nos llevamos un susto que para qué les cuento. Tan gritones y gritonas , tan serios y serias, tan secos y secas (lo de ellos y ellas es por ser políticamente correcta.
Sigamos. Menudo susto que nos llevamos en cuanto empezamos a hablar con vosotros. Ni un ‘por favor’, ni un ‘gracias’, ni una sonrisa, ese tono tan alto e imperativo para dirigirse a una.¡Ay Dios mío! Dónde me fui yo a meter piensa una. Alguien te responde ¡ a España maja! y ya ve dejando tanto gracias y preguntando a cada rato si puedes, que aquí no es asi. Y una piensa y ¿cómo me entero yo si ‘puedo’, si no lo puedo preguntar ? Después escuchas por ahí que te llaman lenta y tú piensas a ver ¿ cómo hago yo para saberlo , si no puedo preguntar? Cómo me apuro si no sé cómo hacerlo y nadie me quiere decir y encima tienen costumbre tan raras (recordar que si os parezco rara, vosotros a mí también) se dan dos besos para saludarse, hablan de su vida íntima como del tiempo, la mayoría dice que no cree en Dios pero siempre van con Él al baño, por qué dicen me cago en ...? Eso para nosotros suena fatal .
Después pasan los días y descubres que el bicho con costumbres extrañas eres tú. En realidad cuando le sonríes a un chico, porque una sonríe siempre, resulta que te lo quieres ligar, si le haces ver que no es el caso te mira incrédulo. Tenéis que comprender que sonreímos a menudo porque nos enseñaron así. En general vestimos de forma llamativa, nos gusta bailar y somos muy sociables. Nosotros sin la familia sentimos que no somos nada, por eso lo primero que hacemos es traernos al marido o venirnos detrás de él y con nosotros los hijos. Nos gusta tener amigos y ellos son como de la familia, por eso nuestras casas casi siempre están llenas de personas y a veces hacemos más ruido del que os gusta ¡perdón! Es que no tenemos tanta costumbre de ir al bar. y nos vemos y reunimos en nuestra casa, para los cumpleaños, ver los partidos de fútbol, para hablar y compartir. Lo dicho, valoramos muchísimo la amistad y por eso también valoramos vuestra acogida amable, vuestra solidaridad y el apoyo desinteresado que nos brindáis para salir adelante, sois disciplinados y responsables, tenemos mucho para aprender de vosotros y tenemos mucho para brindaros.
Licia LÓPEZ CARBAJAL
Al llegar a casa lo leí y me hizo reflexionar sobre cómo percibimos y cómo nos perciben unos extranjeros que son como hermanos nuestros. Creemos conocerlos , sin darnos cuenta que hay muchas actitudes y comportamientos nuestros que pueden resultarles chocantes. Transcribo sus impresiones porque me parece que merece la pena una reflexión por nuestra parte.
LA MUJER LATINOAMERICANA
Teniendo en cuenta que cada ser humano es único e irrepetible, voy a intentar responder a algunas inquietudes que flotan en el aire.De la mujer latinoamericana se dicen muchas cosas, todas diferentes. No es que todas seamos iguales, pero así como hay un prototipo de mujer española que casi nunca se ajusta a la realidad. Hay uno de la mujer hispanoamericana y lo que se dice de nosotras tampoco es real. Y claro , salimos muy mal paradas. ¿Cómo somos las latinoamericanas? Los medios de comunicación , la publicidad y nuestros culebrones son, en parte, responsables de la imagen que hoy tienen de nosotras.
Os lo demuestro. ¿Cómo imagináis que es la vida cotidiana en el Caribe? Playita, chicas ligeras de ropa dorándose al sol, pobreza, simplicidad y mucha alegría, lo único cierto es que los caribeños son alegres, el resto pertenece a la imaginación del publicista... “si nos tomásemos la vida en serio como en el Caribe?”
Nuestra alegría confunde, como si para ser una persona seria y responsable hiciera falta andar todo el día con el ceño fruncido, con cara de enojado. Tampoco nos parecemos a los personajes de nuestros culebrones, eso es ficción, está creado para entretener y sólo tienen de la vida cotidiana el acento hispano, lo demás pertenece a la caja boba.
Se dice también que las mujeres inmigrantes son todas... ya lo sabéis, trabajadoras del amor, y es que a lo mejor confundís la alegría en el vestir y el hablar dulce con otra cosa. También nos gusta la economía, la medicina, el periodismo, el arte, en fin. Aunque os parezca extraño, ¡somos como vosotros!
De nosotros se dice que estropeamos el mercado porque aceptamos salarios más bajos ¿Y no será que lo aceptamos así porque no nos quieren pagar más? Igual que en el caso de la mujeres ¿pensáis en general que les hace gracia ganar menos por la misma tarea que los hombres?
Por naturaleza somos cariñosas, nos gusta que quien esté a nuestro lado se sienta bien, pero eso os confunde, lo sentimos, somos así, sin explicaciones. Al igual que nos gusta ir arregladas, para vosotros en exceso, o cuando pensáis que queremos ligarnos a todo el que se cruza con nosotras y lo que sucede es que sólo estamos siendo como sabemos ser. En general somos suaves de trato, a algunas se nos contagia eso de ir gritando y diciendo palabrotas, pero cuando estamos recién llegados nos llevamos un susto que para qué les cuento. Tan gritones y gritonas , tan serios y serias, tan secos y secas (lo de ellos y ellas es por ser políticamente correcta.
Sigamos. Menudo susto que nos llevamos en cuanto empezamos a hablar con vosotros. Ni un ‘por favor’, ni un ‘gracias’, ni una sonrisa, ese tono tan alto e imperativo para dirigirse a una.¡Ay Dios mío! Dónde me fui yo a meter piensa una. Alguien te responde ¡ a España maja! y ya ve dejando tanto gracias y preguntando a cada rato si puedes, que aquí no es asi. Y una piensa y ¿cómo me entero yo si ‘puedo’, si no lo puedo preguntar ? Después escuchas por ahí que te llaman lenta y tú piensas a ver ¿ cómo hago yo para saberlo , si no puedo preguntar? Cómo me apuro si no sé cómo hacerlo y nadie me quiere decir y encima tienen costumbre tan raras (recordar que si os parezco rara, vosotros a mí también) se dan dos besos para saludarse, hablan de su vida íntima como del tiempo, la mayoría dice que no cree en Dios pero siempre van con Él al baño, por qué dicen me cago en ...? Eso para nosotros suena fatal .
Después pasan los días y descubres que el bicho con costumbres extrañas eres tú. En realidad cuando le sonríes a un chico, porque una sonríe siempre, resulta que te lo quieres ligar, si le haces ver que no es el caso te mira incrédulo. Tenéis que comprender que sonreímos a menudo porque nos enseñaron así. En general vestimos de forma llamativa, nos gusta bailar y somos muy sociables. Nosotros sin la familia sentimos que no somos nada, por eso lo primero que hacemos es traernos al marido o venirnos detrás de él y con nosotros los hijos. Nos gusta tener amigos y ellos son como de la familia, por eso nuestras casas casi siempre están llenas de personas y a veces hacemos más ruido del que os gusta ¡perdón! Es que no tenemos tanta costumbre de ir al bar. y nos vemos y reunimos en nuestra casa, para los cumpleaños, ver los partidos de fútbol, para hablar y compartir. Lo dicho, valoramos muchísimo la amistad y por eso también valoramos vuestra acogida amable, vuestra solidaridad y el apoyo desinteresado que nos brindáis para salir adelante, sois disciplinados y responsables, tenemos mucho para aprender de vosotros y tenemos mucho para brindaros.
Licia LÓPEZ CARBAJAL
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