Silencio y Decibelios
SILENCIOANTONIO LUCAS
CABO SUELTO
- LA FILÓSOFA Victoria Camps dijo el domingo en El País que aquí falta silencio. Que hay demasiado decibelio para tan poca claridad de ideas y que ese ruido constante confunde a la peña.
- En España da miedo callar porque enseguida aparece un listo a estrellarte su verdad en medio de la cena. Aquí manda la bulla.
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| Tren-tulianos |
- Las televisiones se llenan de tertulias infectas donde ciertos patanes clonados, de una cadena a otra, hablan como bacterias resistentes al decoro. Gentes que tienen toda la ignorancia por delante y se vitorean a hostias entre ellos.
- Periodistas empantanados, novelistas de plató, diletantes, enteradillos, vocingleros de la moraima del chisme y otras especies forjadas con el furor del manos libres. Están incapacitados para el silencio de la sensatez y esa angustia se les nota.
-La bulla, que es una rudimentaria forma de censura contra las opiniones desiguales. En los últimos años hemos sido instruidos en una hipermoralidad abrasiva y ruidosa.
- «Falta voluntad y valentía para actuar en consecuencia con lo que decimos que creemos», insiste Victoria Camps
- Aquellos que vomitan insultos procaces del otro lado de la pantalla no representan nada, aunque lo parezca. No tienen variedad creativa ni imaginativa. Sólo son percantas del jaleo, el brazo tonto de un estado de confusión en el que ejercen de pregoneros.
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(Estas líneas están elegidas del artículo de "El Mundo": 12/08/ 2014 . Es una buena lección de SILENCIO)
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