‘Un día’ después…
No sé si, una vez más, aprovechan de los muertos que ya no pueden
hablar. No ha pasado todavía una semana
que expusieron el féretro y serios, compungidos por unas y otras partes, acompañaban
el duelo. Habían pasado once años mudo, en la que nadie, salvo su familia y
aquella visita que le puso en su hombro
un poco 'judesco'. De la víctima nada se sabía, ni de los que también le habían
señalado con el beso de Judas.
Llegó el aviso que ya se ‘marchaba’ el que había
quedado mudo y hasta alguno dijo que por
qué se ‘adelantaban’. Pero llegó la hora en punto. Allí los lamentos, allí las
caras serias, los ‘duelos’, los pésames, las alabanzas y los aplausos. Todo fue fasto, aplausos
de ánimo, lágrimas y palabras de agradecimiento. Apenas dio tiempo para cubrir
su cuerpo, junto al de su esposa, para descansar ya dentro.
Ya, al día siguiente, se calló la música fúnebre y
las salvas de pólvora, se habló de noblezas, se examinó uno a uno los que iban de
negro y cuchicheaban sobre los de luto.
Hoy, domingo, no ha habido apenas tiempo, y ya se
llenan los/algunos periódicos llenando páginas, preparando libros, cubriendo las
columnas donde se cuentan ‘ad propium modum’ lo que en once años estuvieron en total
silencio.
No sé qué es más tranquilo: ¿vivir ‘desaparecido’ o que aprovechen del silencio eterno?
Comentarios
Como siempre, durará un tiempo, y saldrá a la luz de vez en cuando. Surgirá cuando el tiempo lo pida o a los 'participantes' les convenga.
La primera ya ha asomado la 'patita'.
(De todos modos no es nada 'nuevo')