La reflexión del día

PEDRO G. CUARTANGO
La sociedad volátil


"EL FILÓSOFO polaco Zygmunt Bauman define la modernidad como un estado de liquidez. Me parece más acertada la noción de volatilidad, que expresa mejor las dos características del mundo en el que vivimos: la fragilidad del individuo y la acelerada caducidad de las cosas.

La sensación de seguridad respecto al futuro que existía hace 10 años se ha desvanecido y da la impresión de que estamos sometidos a un cambio vertiginoso que nos impide hacer planes sobre nuestra vida. Casi todo es caduco y frágil: las relaciones personales, el trabajo, la política, la estética e incluso el sexo.

Los últimos avances de la física contribuyen a acentuar el concepto de volatilidad al poner de relieve que la materia está formada por partículas que interactúan en continuo movimiento cuya trayectoria es imposible de predecir.

Dado que el ser humano ha sido educado para vivir en el ámbito de la certeza y la previsibilidad, esta volatilidad nos produce una incómoda sensación de malestar al agudizar la percepción de la propia vulnerabilidad. Pero no hay otra alternativa que vivir con esta realidad.


La veloz sucesión de los acontecimientos tiene otro problema: que nos hace perder la perspectiva y nos impide distinguir entre lo bueno y lo malo, lo valioso y lo banal. Lo único que pesa es un presente precario que nos arrastra como una poderosa corriente en el mar. No podemos resistir la fuerza de unos cambios que no controlamos y frente a los que también carecen de respuesta las instituciones y los partidos. Eso explica el nacimiento de organizaciones como Podemos, cuyo éxito reside en ofrecer recetas simplistas frente a situaciones extremadamente complicadas.

La volatidad ha dejado de ser una circunstancia externa a las cosas para convertirse en su propia esencia. Eso lo vio muy bien Heidegger cuando intuyó las consecuencias del avance de la técnica y la despersonalización del mundo contemporáneo.

Para decirlo de otra forma, la volatidad nos impide ser y nos impulsa a existir, o, peor todavía, a sobrevivir en un entorno siempre cambiante al que nos tenemos que adaptar. Es darwinismo puro. Difícil saber a dónde nos lleva esta tendencia de las sociedades avanzadas que nos retrotrae a la vulnerabilidad del hombre del Paleolítico."

Volatilidad / Líquida
-"La fragilidad del individuo y la acelerada caducidad" " / The Liquid Modern World (Bauman)"
- Casi todo es caduco y frágil: las relaciones personales, el trabajo, la política, la estética e incluso el sexo.
- Vivir en el ámbito de la certeza y la previsibilidad, esta volatilidad nos produce una incómoda sensación de malestar al agudizar la percepción de la propia vulnerabilidad
- La veloz sucesión de los acontecimientos tiene otro problema. Eso explica el nacimiento de organizaciones como Podemos, cuyo éxito reside en ofrecer recetas simplistas frente a situaciones extremadamente complicadas.
- Las consecuencias del avance de la técnica y la despersonalización del mundo contemporáneo.


Comentarios

María ha dicho que…
Hola JLUIO &CIA! hacía mucho que no me pasaba a darte los buenos días ( perdóname) desde este verano que me tomé vacaciones de estos mundos entro así a salto de mata y hace día que quería pasarme a dejarte a ti y a todos en la isla un besito, así que quedan todos Vds embesados ;)

Respecto de la reflexión que compartes hoy me temo que siempre ha sido así en realidad, quiero decir que la volatilidad es una cualidad consustancial a los seres humanos, casi te diría a los seres vivos de este planeta en general otra cosa son las cantidad de mentiras, argumentaciones que nos hemos inventado para obviar o amortiguar esta realidad... la única parte del ser humano que carece de volatilidad es exclusiva de él, tienes visos de eternidad y desgraciadamente cuidamos menos que nada es nuestro interior, nuestra esencia, la energía misma que vive en nosotros y nos hace vivir. Creo que quien es consciente de ella y de su realidad jamás se limitará a existir o sobrevivir sin más.

Muchos besos para todos y todo lo mejor para esta semana en la isla.
Douce y el Náufrago ha dicho que…
Maria,

No niego que la volatilidad es una cualidad consustancial a los seres humanos, pero actualmente creo que la 'volatilidad' o la 'liquided' se diluyen mucho más rápido. Hay que ver con qué rapidez cambian todas las cosas.

Al menos así lo veo.

Bienvenida, María
María ha dicho que…
Creo mi querido JULIO que las cosas cambian aparentemente ... solo es una sensación.. somos los mismos dentro.. la esencia es la que siempre ha sido.. el envoltorio, la forma, varía pero no más que en le pasado lo que creo e insisto en mi idea de antes es que era antes cuando no éramos conscientes de la volatilidad que ahora sentimos más íntima e intensamente .. somos más sinceros .. la vida es más cruda.. la realidad es más descarnada... no se esconden las verdades dolorosa bajo las alfombras.. no se inventan cuentos chinos para quitarnos el miedo.. todo a pelo y sin anestesia.. ¿crees de verdad que tenía una vida más seguridad un emigrante gallego de los que iba con una maleta atada con cuerdas en los 50 o 60 a Alemania o Suiza que un joven sobradamente preparado de los que desgraciadamente tb se ven obligados a salir hoy de este país? ¿ crees que las relaciones humanas eran más menos volátiles hace 30 años que hoy? ... creo que no... dentro .. mírate de dentro ¿ de verdad te ves muy diferente dentro tú a hace 10 años? .. porque yo no.. jaja vamos que me veo menos volátil hoy que hace 10 años :-)


Un placer volver JULIO.. mil gracias por acordarte de mi.. yo tb de vosotros .
Campurriana ha dicho que…
Yo creo que no cambiamos tanto. Que sociedades de antes y de ahora se mueven por los mismos intereses. Quizá, exista esa sensación de rapidez, de mundo cambiante mucho más acentuada. Pero, en el fondo, el mundo no ha dejado de cambiar. De hecho, mi abuela ha vivido cambios que yo creo no viviré. Me refiero a la intensidad de esos cambios. Los de ella, a lo largo de su vida, fueron tremendos.

Un abrazo a los dos.
La esencia del ser humano es parecida. Quizá sí se hayan perdido valores. O no...
Dejadme tiempo para pensarlo, meditarlo.
Campurriana ha dicho que…
A veces, la edad nos puede cegar. El sentido de pertenencia a una generación determinada.

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