¿Quién se llevó mi queso?

"La vida no es ningún pasillo recto y fácil que recorremos
libres y sin obstáculos, sino un laberinto de pasadizos, 

en el que tenemos que buscar nuestro camino, 

perdidos y confusos, detenidos, de vez en cuando, por un callejón sin salida"

A.J Cronin

¡Ojo al parche!. DOUCE

 

Esta mañana después del segundo ‘gilipaseo’, Douce se sentó al lado del Náufrago que estaba dispuesto a empezar su tarea. En su mirada el Náufrago entendió que la Becaria tenía algo que contar, se le veía por su nerviosismo.

- Douce, te conozco, tienes algo que contarme, dijo el Náufrago 

- Pues sí, respondió la Becaria, ayer leí un cuento que seguramente  te gustará.

- Yo ya no tengo edad para que me cuenten cuentos, insistió Nau 

- Eso es lo que tú crees, las personas mayores y sobre todo los más mayores, os creéis que ya lo sabéis todo y no necesitáis más consejos, contraatacó  Douce. Mira, sabiondo, vas a ‘perder’ muy poco tiempo y digas lo que digas lo vas a escuchar porque te vendrá muy bien.  

No sé si decir que eres mayor o que estás muy mayor y no aceptas los  cambios. Escucha y luego me cuentas, cabezón. Se titula:

“¿Quién se llevó mi queso?

“ERASE UNA VEZ un país muy lejano en el que vivían cuatro personajes. Todos corrían por un laberinto en busca del queso con que se alimentaban y que los hacía felices. Dos de ellos eran ratones,  y se llamaban Oliendo y Corriendo (Oli y Corri para sus amigos); los otros dos eran personitas,  seres del tamaño de los ratones,  pero que tenían un aspecto y una manera de actuar muy parecidos a los de los humanos actuales. Sus nombres eran Kif y Kof.

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