Una calle llena de vida

LA CALLE del SOL

"La calle del Sol es una calle de Santander que concentra en menos de 300 metros varias asociaciones culturales, media docena de galerías de arte independientes, una librería, un centro cultural, un espacio teatral y una decena de bares con programación cultural propia. Apartada del bullicio de los paseos y las playas santanderinas, la calle del Sol se ha convertido en un punto de encuentro de artistas, noctámbulos, bohemios, vecinos, soñadores, intelectuales y curiosos que suele descolocar al forastero que llega con ideas preconcebidas de la ciudad.

En este entorno ha nacido Sol Cultural, la colaboración espontánea y libre de galeristas, artistas, comerciantes y hosteleros de la zona para celebrar y compartir acciones conjuntas abiertas a todo el mundo. Las propuestas culturales del Sol, similares en objetivos e intención, se han nutrido siempre de la participación, la implicación y la amistad de las gentes de esta calle, los habituales y los que están de paso.

La más antigua del Santander moderno y la más moderna de la ciudad antigua. Una calle en la que siempre ha sido difícil estar desubicado y que, quizá por eso, fue durante años hogar de pescadores, acostumbrados al trasiego de la mar. Por eso y por la calidad de su brisa nocturna acabó siendo el lugar predilecto de generaciones de creadores e inconformistas en algún momento de sus vidas.

Cuando el sol empiece a caer esta tarde, es posible que encontremos a viejos amigos en el Sol".

"Solcultural"

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Por esta calle se dejó caer  el Náufrago esta mañana de domingo en que el sol veraniego se concentraba en su calle, la Calle del Sol. Y a fe que resulta cálida, soleada, acogedora, viva, esta rúa donde nadie se siente forastero.

Libro-poema-Libro.- C. SALOMÓN

Hay un montón de incentivos que invitan o solazarse por esos 300 metros de vida, de arte y libertad. Hoy, como el año pasado, participó de esta celebración del solsticio veraniego. El programa de actividades y amplio en el que pueden participar de niños hasta señores de edad provecta. Quizá por eso el Náufrago no se considera ajeno.

Como otros años llevaba su cámara presta, porque cada mirada es momento de vida. Vida en todos los sentidos. Mientras prepara el resto de instantes captados, deja aquí una muestra. Alguien recitaba varios poemas de un ilustre vecino de esta calle, Carlos Salomón, ya fallecido. Él tran sensible, tan dolorosamente vivo se sentirá feliz de alguna forma oyendo a sus vecinos escuchar cómo sentía él "El CAMINO"

CONTINUARÁ...