El EGO y la cama

Hay veces que en pleno mayo, un tal atrapa una tos que le dobla y le aconsejan que debe hacer cama. Cuando ese señor es un poco 'cagaprisas' se aburre en la cama. En esa circunstancia, para no estar mirando el techo y esperando alguna mosca,  coge el primer libro que tiene a mano y hace un impasse. Es entonces cuando lee un par de hojas y se mira en el espejo que dice así: "Érase una vez...."

" Al ego le encanta quejarse y sentir rencor no sólo de otras personas, sino también de las situaciones. Así como es posible convertir a una persona en enemiga, también puede hacerse lo mismo con una situación. La reacción es siempre: esto no debería estar ocurriendo; no quiero estar aquí; no quiero estar haciendo esto; me están tratando injustamente. Y el mayor enemigo del ego es, por supuesto, el momento presente; es decir, la vida misma.

No se debe confundir quejarse con informar a alguien de un error o deficiencia a fin de que se corrija. Y abstenerse de quejarse no significa necesariamente aceptar la mala calidad o la mala conducta. No hay ego en decirle al camarero que tu sopa está fría y hay que calentarla, siempre que te atengas a los hechos, que son neutrales. «¿Cómo te atreves a servirme la sopa fría?», eso es quejarse. Ahí hay un «yo» al que le encanta sentirse personalmente ofendido por la sopa fría, y que va a sacarle el máximo partido, un «yo» que disfruta poniendo a otros en evidencia. La queja de la que estamos hablando está al servicio del ego, no del cambio. A veces es evidente que el ego no quiere que nada cambie, para poder seguir quejándose."

"Un nuevo Mundo, AHORA"
 E. TOLLE 

 (La mosca no  se presentó y pudo leer un poco)

Ejemplo de EGO