El primer día de playa

EXPERIENCIAS

Mira Douce hoy voy a hablar contigo y quizá tú estés callada, cosa que es difícil en ti. Querría que fuera breve  mi charla, pero ni tú ni yo a veces lo logramos.

Verás, este año he esperado hasta el 6 de julio para bañarme en la playa. Decir que el tiempo no se ha prestado es un poco una disculpa. Hoy, por fin, me he decidido. El agua estaba un poco fría, pero por estos pagos no es nada extraño. Tú lo sabes bien porque aunque eres perra de aguas, sólo te metías un poquito cuando yo entraba. La playa estaba preciosa por todas las razones, el calor justo, el paisaje precioso y además no estaba  abarrotada, algo que no soporto… Caprichos de uno.

Este año no tendré coche,  tú ya sabes por qué. Te advierto que el autobús si no vas a hora punta puedes ir perfectamente y ahorrarte el buscar un ‘agujero’ donde dejar el cacharro, tú lo sabes.

Otra cosa quiero compartir contigo, aunque te aburras un poco y estés callada, cosa rara. La cámara que tenía está en la ‘clínica’ y me he procurado una de 94 € que de momento me sirve para mis ‘instantes’. Quise probar  porque ya sabes que sin ‘mirar’ y cazar momentos soy un poco la mitad.

El día estaba hermoso (¿lo he dicho ya?) y el paisaje precioso (¿también lo he dicho? Bueno, como sea, y como tú no me interrumpes te voy a decir lo que he sentido cuando he visto las fotos ya en casa. Sabes que no soy demasiado buen fotógrafo y sobre todo no sé nada de técnica y de nada serviría  aunque la tuviera. Esta tarde, al colocarlas, me  parecían ‘hormiguitas’ y además poco claras, sin embargo el paisaje me gustaba.

Eso es lo quería comentar contigo, porque no tengo a mano quién me enseñara  algún día. “Algún día”. Douce ¿sabes tú cuándo será ese día y ese ‘sabio’ del foco?

Gracias, Douce. Ahora hablaremos tú y yo… Me lo dirás tú TODO y yo seré el oyente. ¿Vale?

Experencias from Miss Douce