Las historias de Douce, la becaria

LICURGO, LOS PERROS Y LAS LIEBRES: Λυκούργος, τα σκυλιά και οι λαγοί.

Estoy un poco cansada de las historias del Náufrago y va siendo hora de que hable de lo mío. Les voy a contar algo que aprendí en la academia de  Esparta hace mucho, mucho tiempo, en mi anterior vida.

...HACIA 700  A. de C.?- 630 EN ESPARTA, GRECIA.
"Cuenta la historia que en cierta ocasión el Legislador griego Licurgo, fue invitado a dar una exposición sobre la educación. Aceptó gustoso pero pidió que le dieran seis meses de plazo para prepararse. La respuesta produjo una sensación de extrañeza, pues todos conocían su erudición en el tema y fue ese el motivo por el que lo habían invitado.
Caesar van  Everdingen (1617-1678)

Pasados los seis meses, compareció ante la Asamblea, Licurgo hizo una señal a su criado, y éste abrió la jaula de una de las liebres. El pequeño animalito, salió corriendo. A una nueva señal, otro criado abrió la jaula de uno de los perros, y éste ferozmente, cazó la liebre y la destrozó rápidamente con los dientes. La dantesca escena impresionó a la asamblea, nadie entendía lo que Licurgo pretendía demostrar con semejante acto de agresión. subió a la tribuna y sus criados trajeron cuatro jaulas. En el interior de cada una había un animal, en dos de ellas una liebre y en las otras dos un perro, de iguales características.

En total silencio, Licurgo, da otra señal y otra liebre es liberada e inmediatamente sueltan al otro perro. Conteniendo la respiración, el público miraba azorado, otros se tapaban los ojos para no ver la repetición de esa masacre y muerte del indefenso animalito. El perro salta de la jaula hacia la liebre, pero en lugar de destrozarla con sus dientes como hiciera el otro, la toca con la pata, ésta cae, se levanta y se ponen a jugar ante la sorpresa de todos saltando uno alrededor del otro, demostrando una convivencia pacífica y armónica.Entonces dirigiéndose a la asamblea Licurgo se levantó y dijo:

- Señores, acabáis de asistir a una demostración de lo que puede la educación. Ambas liebres son hermanas, hijas de la misma madre, alimentadas de la misma manera y recibieron los mismos tratos. Iguales son los perros, la diferencia entre ellos está simplemente en la educación que cada uno ha recibido.
La educación, con una concepción exacta de la vida, transformaría la cara del mundo. Debemos educar a nuestros hijos, esclarecer su inteligencia, pero ante todo, hablar a su corazón, enseñándoles a despojarse de sus imperfecciones. ¡La sabiduría por excelencia consiste en volvernos mejores!"

Les supongo inteligentes. Si educar tiene su raíz latina en (educare > educere): 'extraer de dentro, guiar'. La educación no es  sólo dar informaciones, sino trabajar las potencialidades propias de cada ser, y hacer que florezcan con toda su bondad. He dicho.

Douce, la becaria... Y no me llamen 'antigua'

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