Nota a pie de página
LOS LIBROS QUE VIENEN
Los 'libros que vienen' ya están aquí. Hoy, en dos suplementos dominicales diferentes, aparecen artículos sobre el "Libro del futuro" o "El eBook ya tiene quien lo escriba". Los autores de ambos artículos resaltan la variedad de modelos, las ventajas técnicas, sus esperanzas de futuro y ya dan número de ejemplares vendidos, precios y ventajas. Casi sólo se habla de eso, de ventas y de difusión. Nada se dice de si realmente crecerá de verdad la auténtica lectura, el placer de leer, la originalidad de los libros, la mejora de la escritura, y si nos enriquecerán más a los lectores, no a empresas y editores.
El Náufrago pertenece a la generación Gutemberg y, sin pretender ser profeta, porque podría tragarse sus propias profecías, no se ve demasiado apuntando con el punzón el signo de pasar página. El no moja el dedo índice para pasar las páginas de sus libros, pero casi. Le gusta sentir el tacto del papel, acariciar su encuadernación, marcar con el lápiz, verlos amontonados o alineados en las estantería de la biblioteca. Cierto que los libros digitales facilitarán, el subrayado de frases y párrafos, la carga y descarga de miles de archivos y ejemplares... Pero no es la cantidad y la funcionalidad lo que principalmente interesa, sino la calidad, el tiempo a ello dedicado, el gusto por tener algo vivo entre las manos.
De momento, sigue viéndose con el libro de papel en la mano, casi podría decir que le gustaría morir con un libro entre las manos.Bueno, a lo mejor se ha pasado un poco.
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Foto: XLSemanal
Los 'libros que vienen' ya están aquí. Hoy, en dos suplementos dominicales diferentes, aparecen artículos sobre el "Libro del futuro" o "El eBook ya tiene quien lo escriba". Los autores de ambos artículos resaltan la variedad de modelos, las ventajas técnicas, sus esperanzas de futuro y ya dan número de ejemplares vendidos, precios y ventajas. Casi sólo se habla de eso, de ventas y de difusión. Nada se dice de si realmente crecerá de verdad la auténtica lectura, el placer de leer, la originalidad de los libros, la mejora de la escritura, y si nos enriquecerán más a los lectores, no a empresas y editores.El Náufrago pertenece a la generación Gutemberg y, sin pretender ser profeta, porque podría tragarse sus propias profecías, no se ve demasiado apuntando con el punzón el signo de pasar página. El no moja el dedo índice para pasar las páginas de sus libros, pero casi. Le gusta sentir el tacto del papel, acariciar su encuadernación, marcar con el lápiz, verlos amontonados o alineados en las estantería de la biblioteca. Cierto que los libros digitales facilitarán, el subrayado de frases y párrafos, la carga y descarga de miles de archivos y ejemplares... Pero no es la cantidad y la funcionalidad lo que principalmente interesa, sino la calidad, el tiempo a ello dedicado, el gusto por tener algo vivo entre las manos.
De momento, sigue viéndose con el libro de papel en la mano, casi podría decir que le gustaría morir con un libro entre las manos.Bueno, a lo mejor se ha pasado un poco.
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